Les queda un año para caer del guindo
Opinión
25 Jun 2013. Actualizado a las 07:00 h.
A un año vista de las elecciones al Parlamento Europeo, las organizaciones políticas que conocemos han seguido el mismo proceso: una reflexión sobre sus fuerzas y posibilidades; cuando han concluido que son insuficientes para alcanzar la representación parlamentaria, una serie de contactos con organizaciones afines para sondear la posibilidad de sumar votos; un proceso de debate interno con todo tipo de desencuentros, y la misma decisión prudente: aplazar este asunto hasta después del verano. Hasta ahora, aquellos que compitieron por los 50 eurodiputados no han aspirado a sumar sus fuerzas con grupos afines de otros Estados para determinar las políticas de la UE. Ni sirvieron sus campañas para promocionar europeísmo alguno: al recordar algo de la contienda del 2009 el primer tema que nos viene a la cabeza es la pederastia, y el aborto, traídos al debate por el candidato del PP Jaime Mayor Oreja. Sean grandes o pequeñas las organizaciones que compiten por los 54 eurodiputados, su doble interés principal fue siempre obtener cuantiosos recursos públicos para financiarse, como en el fútbol se ingresa de la UEFA según se pasan las rondas, y salir bien en la foto. No hay más. La foto es decisiva porque dará la relación de fuerza PSOE-PP y su distancia de terceras opciones. Y nos dirá si el muy transversal y mayoritario 15-M se ha organizado en modo electoral para aglutinar el espacio de ruptura, pasando por encima de la IU/ICV de Cayo Lara y su líder de diseño Joan Herrera.
En el PSOE no pueden esperar otra cosa que un resultado del entorno de los 3,5 millones de votos, 4 millones como mucho. El asunto no se resuelve con una lista transnacional. Los socialdemócratas alemanes no quieren eurobonos, los españoles sí. La diferencia es sustancial y omitirlo conduce a construir sobre un error además nefasto, porque indigna a los electores más jóvenes y urbanos, que son la vanguardia de la ruptura ciudadana con el sistema: se enteran de todo, lo documentan y difunden otra verdad más cierta. De modo que el PSOE solo se puede esperar la catástrofe por mucho Hollande que pasee. Que el PP saldrá en esta foto como recién levantado de la cama lo descubre el movimiento envolvente de Aznar sobre los críticos con Rajoy: tenéis razón y no estáis solos. Tal movimiento ha reforzado la fidelidad al PP de Rajoy de los 6 millones de votantes que le quedan, luego ha funcionado aunque no resuelva el problema. Lo bonito serán las caras nuevas de la foto europea, ciudadanos organizados enfrente en modo electoral. El enésimo ejemplo: liderará alguien como el gran Wyoming diciendo que hasta aquí hemos llegado, y esa candidatura pasará por encima de IU/ICV, con su joven Garzón, para colocarse al lado del PSOE y del PP en las elecciones generales del 2015. Los políticos y los comentaristas siguen sin enterarse o mirando para otro lado; les queda un año para caer del guindo.
Jaime Miquel es analista electoral