España, peor que Italia
Opinión
23 Mar 2020. Actualizado a las 13:39 h.
El análisis científico de la expansión de una pandemia se basa en dos factores. El primero es la matemática de la reacción en cadena, que seguramente ya les suene: 1 persona infecta a 3, que infectan cada una a otras 3. 9 nuevas, que sumadas a las 4 que ya había, dan 13. Las últimas 9 infectan a otras 27. En tres pasos hemos pasado de 1 enfermo a 40 (los primeros se irán muriendo o curando). La famosa curva.
Si en ese momento se decreta el confinamiento, y se consigue parar el 80% de la cadena, solo 5 de los 27 nuevos casos seguirán infectando, creando otros 15. El 80% de esos 15 (12) serán parados por el confinamiento: solo 3 seguirán infectando, creando otros 9, de los que gracias al confinamiento solo seguirán infectando 1 o 2. Como ven, si hacemos bien el confinamiento, la cosa se para. Sin embargo, si lo hacemos mal, se dispara.
El segundo factor es la geometría de la red de comunicaciones del país. En Italia la cosa comenzó en el norte, y fluyó hacia el sur, a través de su franja peninsular. Pero la geometría española es distinta: somos un país radial, y la mala suerte es que tenemos la mancha de infección justo en el centro, una mancha que se ha difundido a Murcia, a Galicia... La tormenta perfecta.
Italia tiene más de 60 millones de habitantes, España el 75 % de esa cantidad: si nos fuese tan mal como a ellos deberíamos tener también el 75 % de sus enfermos, pero me da que podremos tener más casos que ellos, pese a tener menos población. Cosas de nuestra geometría… y de los insensatos que rompen el confinamiento.