Lejos de Galapagar
Opinión
17 Feb 2023. Actualizado a las 05:00 h.
No hay como poner tierra de por medio para ver las cosas con perspectiva e intentar librarse de los problemas. En esta materia, Pedro sabe más latín que Julio César. Parece que le esté sentando bien tomar distancia, el mechón blanco de su cabeza es casi imperceptible, el gesto recupera la seguridad perdida, la mirada como de estadista viendo un futuro que el resto del mundo no tiene la capacidad de ver tiene un pase. No hace falta que Pedro diga que se siente a gusto pasando revista a la guardia de honor austríaca en Viena. Tan lejos del cuartel general de Podemos emerge un hombre cómodo y confiado, como si a 2.400 kilómetros uno encontrara los sabores y los olores del hogar. Hasta se va a permitir el lujo, está a punto de hacerlo, de reñir a las irenemonteros y los pabloiglesias. Que dejen de hacer ruido, dirá. Sí, Pedro se siente fuerte. El día menos pensado, este hombre va a ejercer de presidente del Gobierno.