«Black Panther» reina en los premios del Sindicato de Actores
Ourense
Los SAG Awards calcan los Globos de Oro con Glenn Close y Rami Malek y refrendan su carrera hacia los Óscar
29 Jan 2019. Actualizado a las 05:00 h.
La negritud acaparó buena parte del protagonismo en la gala de la 25.ª edición de los premios del Sindicato de Actores de EE.UU. (SAG, en sus siglas en inglés), que se celebró en la madrugada de ayer en el auditorio Shrine de Los Ángeles. Fue la noche de la película de superhéroes Black Panther, que triunfó al alzarse con el galardón al mejor elenco de un filme.
Flanqueado en el escenario por su compañeros Sterling K. Brown, Angela Bassett, Lupita Nyong’o, Danai Gurira, Michael B. Jordan y -el único no afroamericano de los presentes- Andy Serkis, el actor Chadwick Boseman tomó la palabra para irónicamente interrogarse sobre si este filme había modificado el modo en que Hollywood ve y trata a los artistas negros. «Todos sabemos lo que se siente cuando te dicen que no hay lugar para ti en una pantalla o un escenario, sabemos lo que es ser cola y no ser cabeza, y eso aunque seas joven, talentoso y negro -ahondó Boseman, que da vida a Black Panther-. Sabíamos que teníamos algo especial que ofrecer, y con esa convicción trabajamos cada día, porque sabíamos que podíamos ser humanos de pleno derecho en los papeles que interpretábamos», dijo. El filme sobre el superhéroe africano de la casa Marvel, que lideró la taquilla mundial en el 2018, superó a la favorita Ha nacido una estrella, de Bradley Cooper, y a Infiltrado en el KKKlan, de Spike Lee.
Los SAG Awards son un termómetro más para tratar de prever lo que sucederá en los Óscars -se entregarán en la madrugada del 25 de febrero-, máxime cuando confirman lo sucedido en los Globos de Oro. Fue lo que ocurrió en las categorías de interpretación individual, en las que Rami Malek -con su Freddie Mercury en Bohemian Rhapsody- y Glenn Close -con su papel en La buena esposa- dejaron de nuevo con la miel en los labios a Christian Bale (y su recreación del ex vicepresidente estadounidense Dick Cheney) y Olivia Colman (insufla vida a la reina Ana en La favorita) y, de paso, a Lady Gaga (por A Star is Born).
También Mahershala Ali sumó el SAG a su Globo de Oro al mejor actor de reparto por su encarnación en Green Book del pianista negro Donald Shirley, que osó en 1932 hacer una gira por el racista sur de EE.UU. No repitió, en cambio, Regina King por El blues de Beale Street: la estatuilla a la mejor actriz de reparto fue para Emily Blunt por el thriller fantástico Un lugar tranquilo, dirigido por su esposo, John Krasinski.
Como en los Globos de Oro, Penélope Cruz y Antonio Banderas se fueron de vacío con sus candidaturas en el apartado de televisión, donde La maravillosa sra. Maisel, la serie de Amazon sobre una monologuista en los 50, arrasó en la comedia. El reparto de This is Us se alzó con el premio al mejor elenco.