El TSXG ve «acuciante» solucionar el colapso del juzgado de familia
Ourense
Repartir el trabajo con otra sala o crear una oficina para incapacidades, posibles medidas que se plantean
22 Jan 2021. Actualizado a las 05:00 h.
El juzgado de familia de Ourense sigue siendo el más colapsado de Galicia y hacen falta medidas urgentes para paliar esta situación. Así lo advirtió este jueves en Ourense el presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, José María Gómez y Díaz-Castroverde, que estuvo en la capital ourensana para reunirse, como ya hiciera hace un año, con los representantes de la judicatura para conocer «de primera mano» las necesidades.
En ese encuentro se habló, sobre todo, de los problemas que persisten en la jurisdicción civil y especialmente en el Juzgado de Primera Instancia 6, especializado en asuntos de familia, incapaz desde hace ya más de dos años de dar una respuesta rápida a los asuntos por el ingente trabajo que soporta. «Hemos analizado las diferentes jurisdicciones, pero básicamente nos hemos centrado en la jurisdicción civil, y en la problemática del atraso del juzgado de familia, intentando buscar fórmulas eficaces para poner remedio a esta solución», reconoció Díaz-Castroverde a los medios de comunicación.
Y es que ahora mismo no está claro qué medidas se van a poner en marcha para paliar el colapso, después de que el Consejo General del Poder Judicial rechazara la que se acordó por la sala de gobierno del TSXG el año pasado. Aquella iniciativa pretendía repartir entre el resto de juzgados civiles una parte del trabajo de familia, en concreto los asuntos relativos a internamientos no voluntarios, pero dos juezas recurrieron esa medida al Consejo General del Poder Judicial, que les dio la razón. «El consejo rechazó la propuesta no por razones de fondo, sino por el procedimiento que se había seguido, por lo que ahora se ha hecho un nuevo informe en el que se plantean otras alternativas que nosotros estamos barajando, y en los próximos quince o veinte días la sala de gobierno tomará una decisión que esperamos que sea certera», dijo el presidente del alto tribunal gallego, que dejó claro que las dos magistradas estaban en su derecho a interponer recurso, «y a mí me parece bien que lo hicieran».
Eso sí, es tiempo de buscar nuevos caminos y Díaz-Castroverde ya avanzó algunas de las ideas que están sobre la mesa. Una de ellas sería contar con dos juzgados que lleven los asuntos. «Podría ser que el juzgado de primera instancia 7 se especializara también en familia, ese es un tema que no está decidido, pero de ser así las dos sedes tendrían que tener competencias de otras materias del orden civil», advirtió, sin ocultar pese a todo que, en su opinión, el reparto que se propuso inicialmente era la mejor solución. «El consejo lo anuló al entender que no era posible formalizarla por la vía de modificación de normas de reparto», dijo, explicando que existen otras alternativas para paliar el colapso, como la puesta en marcha de una oficina específica para tramitación de tutelas e incapacidades. «Esto ya no depende solo de nosotros, depende de otras administraciones», dijo.
El más colapsado de Galicia
De lo que no quedó duda es de que parece prioritario solucionar el tema cuanto antes. «Hay que entender que tanto la sala de gobierno como el presidente del Tribunal Superior no pueden dar la espalda a un problema que conocen perfectamente y que es acuciante, porque como todo el mundo sabe el juzgado de familia de Ourense es al más colapsado de Galicia», recordó, garantizando que «vamos a intentar que esto en el mes de febrero quede resuelto».
La entrada de asuntos en esta sala se ha ido incrementando a lo largo de los últimos años, alcanzando un 127 % en 2018; un 141 % en 2019; y un 106 % en el primer semestre del año 2020. En estas circunstancias, con datos del 30 de junio pasado, el tiempo medio de respuesta era de casi un año, superior al de otros juzgados de familia tanto gallegos como nacionales, donde en ningún caso se llegaba a los ocho meses. La saturación ya provocó que el año pasado se pusiera en marcha un juzgado bis, por lo que ahora son dos jueces los que resuelven asuntos y tratan de agilizar el trabajo, pero la medida no ha servido de momento para solucionar el retraso acumulado, que tiene mucho que ver con el alto número de residencia de ancianos que hay en la provincia y la complejidad de controlarlas.
El presidente del alto tribunal dice que ya se han recuperado los retrasos del covid
La irrupción del covid-19 y la declaración del estado de alarma, con el consiguiente confinamiento general, provocó la paralización casi total de los juzgados durante muchas semanas el año pasado. Desde entonces, según el presidente del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, se ha logrado recuperar el tiempo perdido. «Hemos tenido casi cuatro meses de suspensión de plazos procesales, lo que implicó la paralización de la actividad, pero creo que nos hemos recuperado bastante bien», admitió, explicando que desde la sala de gobierno se aprobó un protocolo para señalamientos con mejoras que garantizaran la seguridad en los juzgados «que está funcionando», aseguró.
Eso sí, en plena tercera ola y con los contagios en niveles muy preocupantes, recuerda que la prioridad sigue siendo garantizar la salud y mantener en la medida de lo posible la actividad en los juzgados. «Tenemos dos objetivos, el primero que nadie se contagie en un juzgado, ni los funcionarios, jueces o fiscales, ni tampoco los ciudadanos. Además queremos seguir con nuestra actividad de forma lo más puntual posible para que no haya perjuicios para nadie», dijo, añadiendo que «los contagios que ha habido han sido todos externos y esperamos que siga así».
Contagios en Verín
Sin embargo desde el sindicato Alternativas na Xustiza aseguran que en el juzgado de Verín hay varios funcionarios que han contraído el covid, lo que ha obligado a suspender diligencias. Culpan de esto a la administración por no hacerles PCR y reclaman una desinfección total del edificio, así como más pruebas.