El programa de Jácome en Ourense repite sus promesas incumplidas del año 2019

El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, presentó su programa electoral para las municipales del próximo día 28 de mayo exclusivamente a través de las redes sociales. Así —sin convocar a la prensa y evitando, por lo tanto, cualquier tipo de pregunta— detalló el «listado de objetivos» con el que pretende seducir a los votantes. Son, en resumen, las mismas promesas que en el año 2019, incumplidas en su mayor parte, y en esta ocasión se unen otras que ha ido lanzando ya desde el despacho de Alcaldía, sin que tampoco se hayan hecho realidad en estos cuatro años.

Al igual que en la última cita con las urnas, una de las grandes prioridades de Jácome vuelve a ser el parque acuático termal. A lo largo de este mandato, el Concello de Ourense lo único que hizo fue contratar un anteproyecto y licitar la demolición del viejo matadero. En el programa para el 28M, Democracia Ourensana aclara que el derribo comenzará en mayo. El otro proyecto estrella del año 2019, el centro de inteligencia artificial que Jácome pretendía crear con mil científicos, ya no aparece en esta ocasión. A cambio, propone «una plataforma para evitar la discriminación de la tierra de Ourense, ciudad y provincia, reclamando inversiones del Estado y Xunta, como la creación de polos tecnológicos cuyo desequilibrio impidió, por ejemplo, que la inteligencia artificial se instalase en Ourense».

Entre los proyectos repetidos está, de nuevo, el cambio de la ORA por un sistema de «párking exprés gratuito». Lo prometió hace cuatro años pero la zona azul sigue gestionada en precario por la actual concesionaria y no se han dado pasos en esa línea. Tampoco se cumplió con la anunciada construcción de párkings «low cost» en distintos puntos de la ciudad, pero esa promesa vuelve a aparecer ahora en el programa.

Lo mismo ocurre con los túneles de Otero Pedrayo o Concepción Arenal, con la creación de una ciudad deportiva en O Couto, con la peatonalización de la Nacional 120 o con la construcción de un velódromo, aunque en estos casos Gonzalo Pérez Jácome precisa ahora que será necesaria la cooperación de otras Administraciones.

PXOM casco viejo y bus

Con respecto a proyectos estratégicos, Jácome vuelve anunciar la aprobación del PXOM y utiliza las mismas palabras cuando dice que se compromete a «librarlo de pelotazos». En relación al casco viejo, en el año 2019 Jácome prometía su «rehabilitación integral» y ahora habla de la «rehabilitación de la mitad sur». En esta línea, Democracia Ourensana incluye en su programa la transformación de la vieja cárcel de Progreso en la sede de la UNED —una idea que ya anunciaban en el 2019— o un «hotel boutique termal». Cabe recordar, en este sentido, que la semana pasada el Estado confirmaba la denegación de la ayuda solicitada por el Ayuntamiento para las obras de reforma. En materia de impuestos, DO insiste en proponer una rebaja del 40 % en el de vehículos y culpa a «PSOE, junto BNG con tránsfugas» de no haberla podido aprobar la medida en este mandato.

En relación a la renovación de la flota de autobuses y a la implantación de una línea circular cada quince minutos que prometía en el 2019, Jácome dice que la incorporación de los nuevos vehículos es «inminente» y ahora promete un «bus de alta frecuencia en nueva ruta troncal norte-sur que vertebrará la ciudad». A lo largo de este mandato el alcalde anunció en varias ocasiones la reforma del mapa de líneas e insiste en esa idea en su «listado de objetivos» para el 28M. Según dice, habrá mejoras para el 90 % de la población.

Por lo demás, el programa electoral de Jácome hace un repaso de las promesas lanzadas a lo largo de estos cuatros años en relación a la construcción de ascensores y rampas mecánicas, el nuevo parque de A Ponte, las piscinas de Covadonga y Barrocás o la creación de un parque «mapamundi» (que ahora pretende llevar a la explanada del Auditorio). Un buen ejemplo de ello es la campaña «antisoledad» de «compañía y vigilancia telefónica» que el alcalde prometió en julio del año 2019, cuando había pasado poco más de un mes de su toma de posesión y que ahora reaparece en el programa.

A Ponte y contenedores

Llama la atención, por otra parte, el modo en que Jácome resuelve en este momento dos anuncios que en las últimas municipales había prometido cumplir en un plazo de noventa días, es decir, la renovación de los contenedores subterráneos clausurados desde el año 2014 y la reapertura de la plaza de abastos de A Ponte. Con respecto al primero de los proyectos, lo cita junto a la sustitución de los colectores en superficie, que ya está licitada, y, con respecto al segundo, ahora promete su licitación «para hostelería» este mismo mes de abril. Hay que recordar, sobre este asunto, que el actual gobierno ya licitó la plaza pero el procedimiento acabó quedando desierto.

El alcalde editó 29 veces la publicación y eliminó una alusión a la «mafia» de la UPO

Desde que Gonzalo Pérez Jácome publicó la «versión 1.0» de su programa electoral para el 28M, este domingo a las 20.33 horas, el regidor entró en 29 ocasiones en ese post para hacer modificaciones. En la primera versión aparecía una referencia a la promesa de crear talleres municipales «que sustituyan a la mafia de la UPO (la mal llamada Universidad Popular)». Más tarde, el regidor ourensano matizó que lo que va a sustituir es «la exclusiva de la UPO (la mal llamada Universidad Popular)».

Ese cambio no ha sido suficiente para el BNG, que difundió un comunicado este lunes para criticar la alusión de Jácome. Luis Seara, portavoz del grupo nacionalista, ha anunciado que llevará este asunto al pleno que el Ayuntamiento ourensano celebrará este viernes con la intención de pedir al alcalde que se disculpe. «O feito é de enorme gravidade á par que intolerable. É inadmisible que a máxima autoridade municipal se dixira nestes termos a unha institución que forma parte do propio Concello de Ourense», dice.

La plataforma ciudadana creada en defensa de la Universidade Popular (Queremos UPO) también se ha manifestado al respecto. «Aínda que xa estamos acostumados aos improperios e difamacións inxustificadas que verbaliza o alcalde, non podemos pasar por alto o que supón unha nova aldraxe», subrayan.