Enterrado en Castrelo de Miño el hombre que murió arrollado por un camión en San Cibrao
Ourense
La Guardia Civil sigue investigando lo ocurrido, tras asegurar el conductor del tráiler que no se dio cuenta de haber golpeado a la víctima
14 Jul 2024. Actualizado a las 05:00 h.
El conductor que iba al volante del camión que, a mediodía del pasado viernes, golpeó a un hombre que se encontraba en el arcén de la N-525, en San Cibrao das Viñas, asegura que no se enteró de nada. Así lo confirman fuentes de la Guardia Civil de Tráfico, que localizaron al chófer unas horas después de que ocurriera la tragedia. El hombre, de 65 años, explicó a los agentes que el golpe se pudo producir cuando estaba haciendo una maniobra de marcha atrás, sin que se percatara de que había golpeado a una persona y siguiera su camino tranquilamente.
Que el suceso había sido un atropello se supo porque la víctima aún se encontraba con vida cuando lo vieron. Un testigo advirtió que estaba tendido en la calzada y se acercó para prestarle ayuda. Le contó que lo había arrollado un camión, pero en ese momento no había ningún vehículo en la zona. El testigo alertó de inmediato al 112 y aunque desde la central de coordinación de emergencia se puso en marcha un dispositivo que envió a la zona a personal sanitario en poco tiempo, cuando los médicos llegaron ya era tarde.
Por ahora el causante del atropello no ha sido imputado en ningún delito, si bien la Guardia Civil sigue haciendo averiguaciones para contrastar su declaración.
El fallecido, Francisco Pérez, era un hombre de 56 natural de Macendo, en Castrelo de Miño, que desde hace algunos años residía en Maceda. Casado y con una hija, era uno de los socios fundadores de la empresa Tf3, un negocio especializado en climatización y energías renovables con sede en el polígono empresarial de San Cibrao das Viñas. Su muerte ha causado una gran tristeza entre sus allegados, así como entre amigos y vecinos. El entierro tuvo lugar en la tarde del sábado en el cementerio parroquial de Macendo.