El Arenteiro detuvo su carrera triunfal sin pólvora en Lasesarre: 2-0

El Arenteiro agotó su racha positiva en la visita al Barakaldo, donde se encontró a un rival punzante en ataque y además solvente a la hora de contener los mejores momentos del equipo de Raúl Jardiel, que tampoco supo aprovechar una pena máxima: 2-0.

El elenco gualdinegro fue fiel a su estilo y apretó de salida a los verdes muy arriba proponiendo un fútbol vertical, en busca de la referencia del espigado Maroan Sannadi. Los carballiñeses respondieron con un alto nivel de concentración y voluntad defensiva, pese a que Pablo Santiago —por el perfil zurdo— sacó a pasear su habilidad con la diestra y Diego García sacó una mano salvadora para evitar el gol local. El portero también estuvo fino en un envenenado misil del nueve vasco, que rozó para enviar a córner minutos más tarde. El asedio lo completó su socio de la izquierda, quien también lanzó un centro chut con mala idea, que terminó por repeler la parte alta del travesaño.

Después de ese cuarto de hora inicial, los forasteros lograron sacudirse la andanada de los pupilos de Imanol De la Sota, enlazaron pases y armaron dos buenas transiciones por medio de David Ferreiro, caído a la derecha o Iano Simao por su carril siniestro, pero en ninguna de ellas encontraron a Marcos Baselga. Sí cabeceó Mangel Prendes entre los tres palos, pero cuero le quedó muy centrado y embolsó bien Unai Pérez.

Con el Arenteiro emergiendo, el citado Baselga se escapó por la izquierda y selló su diagonal con un disparo que rechazó Unai. La respuesta de los inquilinos de Lasesarre no podía ser más contundente. Recibió de nuevo Pablo Santiago en su zona de influencia y soltó un centro con rosca que peinó ligeramente Huidrobo, sin que Diego pudiera alcanzar el esférico. Los de Espiñedo intentaron enderezar el marcador antes del intermedio, pero el palo fue duro.

Cuando mordieron sin complejos fue al regreso de los vestuarios, cuando Unai Pérez tuvo que adelantarse con los pies para que Diego Gómez no rematara el óptimo servicio de Ferreiro. En apenas cinco minutos más, el de Molgas no llegó a rematar otra combinación con Iano y Baselga. El equipo de Jardiel crecía, cuando se llevó otro sopapo. Jesús Martínez llegó impetuoso de segunda línea, para golpear fuerte y anotar el segundo.

No se rindieron los carballiñeses, pero Unai era un muro. Primero detuvo un remate de Baselga y, tras una réplica de Revi, cortó de raíz la descarga de su oponente. Aymane derribó a Ferreiro dentro del área. Martín Solar asumió la responsabilidad desde los once metros, pero el arquero se agigantó, sin que Iano pudiera resolver al rechace. Adiós. Enol intentó repetir su potente libre directo del pasado fin de semana, pero ni por esas.