Lara Da Silva: «La D. O. Monterrei no debe vender variedad sino calidad»

El restaurante Miguel González de O Pereiro de Aguiar, con una estrella Michelin, fue el lugar elegido por el consejo regulador de la Denominación Origen Monterrei para dar a conocer los vinos de las nuevas añadas de 19 de sus bodegas. El acto sirvió, además, para poner en valor un territorio y el trabajo que lleva a cabo el consejo regulador para posicionar sus vinos en el mercado. «Lo que más se exporta es la variedad godello. Pero algo en lo que insisto mucho, no solo al público en general y a las bodegas, es que la intención no es vender variedad, porque no nos podemos olvidar de que muchas D. O. hicieron esto y tuvieron que cambiar su promoción. Aquí lo importante es vender el sello de calidad y que los consumidores reconozcan esa tirilla, contraetiqueta, como un sello diferenciador», afirmó la presidenta del consejo regulador de la Denominación de Origen Monterrei, Lara Da Silva. Lo hizo ante los restauradores, sumilleres y distribuidores que acudieron a la cita. Aún así, recordó que el mercado tiene sus necesidades. «Nosotros tenemos la suerte de tener un buen godello y lo trabajamos. Pero las variedades pasan de moda y lo que no debe hacerlo es el sello de calidad», añadió. Vender el territorio es, en este aspecto, fundamental.

«Cuando llegué a la denominación tenía claro que la promoción debía ser constante. Normalmente hacemos túneles del vino pero este año dimos una vuelta y creímos necesario, sobre todo en ámbitos geográficos localizados como Ourense, invitar a hosteleros que llevan haciendo un trabajo muy importante. Nosotros queremos que se conozca Monterrei y que se reconozca su sello de calidad. Estamos muy contentos, en un momento de crecimiento paulatino y constante que a mí, personalmente, me gusta. Tenemos un proyecto que debemos cuidar y es importante a la hora de decidir cómo y cuánto vamos a crecer. Creo que nuestras bodegas y viticultores lo están haciendo muy bien», señaló la presidenta del consejo regulador.

Lara da Silva subrayó el cuidado por la calidad de los vinos. Algo, afirmó, que ya perciben los consumidores. «Cualquiera de las botellas o marcas comerciales que se amparan bajo el sello de Monterrei tienen una calidad excelente», añadió Da Silva.

Luis Paadín, fundador de la Asociación de Sumilleres Gallaecia, actuó de maestro de ceremonias, y destacó el crecimiento de la denominación y las peculiaridades del territorio donde se ubican los viñedos. «Siempre hablamos de horas de luz y no es lo relevante, tenemos las mismas que en Rías Baixas. Cuando me dicen que defina los vinos de Monterrei irremediablemente digo: somos los más continentales de los atlánticos o, visto desde la meseta, los más atlánticos de los continentales. Esa es la clave. No son mejores o peores, sino diferentes», señaló Paadín.