Pontevedra se zafa por O Carballiño del corte de la A-52

En mayo de 1999, la apertura del tramo de autopista Rande-Puxeiros hizo posible que, por fin, pudiese realizarse el viaje de Pontevedra a Ourense y a Madrid por vías de cuatro carriles. Algunos conductores prefirieron, no obstante, continuar viajando a Ourense por la vieja carretera N-541, a través de O Carballiño. El número de los que se decantan por esta opción a ha ido en aumento en los últimos años. Ahora, los cortes de la A-52 en los túneles de Folgoso la hacen aún más atractiva.

Veintitrés kilómetros por carretera y obligación de pasar por el centro de A Cañiza son argumentos de peso para que muchos automovilistas de Pontevedra hayan decidido dar la espalda a la A-52, mientras se arreglan los túneles de Folgoso.

Pero esta tendencia ya viene de atrás. Cortes provocados por reparaciones y asfaltados de la autovía Rías Baixas ya habían inclinado a muchos conductores por la N-541 en los últimos meses. Otros argumentos refuerzan esta elección. Uno de ellos hace referencia a los tiempos de desplazamiento, acortados tras la entrada en servicio de las autovías AG-53 (ruta Santiago-Ourense) y AG-54 (conexión de la anterior con O Carballiño). Ahora, el recorrido entre O Carballiño y Ourense puede realizarse en unos 15 minutos, frente a los 21 que había que invertir anteriormente.

Hora y veinte

Este ahorro de seis minutos deja el recorrido Pontevedra-Ourense en 1 hora y 20 minutos aproximadamente, un tiempo sumamente competitivo con el que se realiza por Vigo, a través de de la AP-9 y la A-52, pero con la ventaja añadida de que no hay que pagar tres euros del peaje.

A la hora de evaluar los tiempos de recorrido hay que tener en cuenta, no obstante, que la hora y cinco minutos estimada para los 70 kilómetros de Pontevedra a O Carballiño está sujeta a muchas variaciones en función del momento de la jornada que se elija para el viaje, el clima o el día de la semana.

Influye asimismo el sentido de la circulación. De Pontevedra a O Carballiño, numerosos carriles lentos facilitan el adelantamiento y, por tanto, se acorta el tiempo. En sentido de O Carballiño a Pontevedra, hay días en que es difícil adelantar y las caravanas alargan los tiempos de forma desesperante, especialmente los domingos a la tarde.