Muere de forma súbita un cabo de la Brilat al término de una sesión deportiva rutinaria
Pontevedra
Pablo Ucha Montero, de 42 años, será sometido a una autopsia para determinar las causas de la muerte
14 May 2013. Actualizado a las 04:32 h.
El cabo primero de la Brilat Pablo Ucha Montero, de 40 años de edad, murió ayer de forma súbita después de la sesión de entrenamiento rutinario que practican cada día a primera hora en la base General Morillo de la Brilat, en Figueirido (Pontevedra). Eran aproximadamente las nueve de la mañana cuando el militar empezó a encontrarse mal, perdió el conocimiento y se desplomó. En un primer momento, fue atendido por el servicio médico de la base. Minutos después, el equipo médico del 061 que acudió hasta el lugar intentó reanimarle, pero ya era demasiado tarde, pese al gran esfuerzo. No puderon hacer nada por salvar su vida.
Las autoridades militares han ordenado que se le practique una autopsia para determinar las causas del fallecimiento, pero las primeras hipótesis apuntan a que puede tratarse de una muerte súbita. Un coche fúnebre trasladó el cadáver hasta el Hospital Provincial, donde será sometido al examen forense. Se desconoce si Pablo Ucha Montero padecía alguna dolencia cardíaca, pero fuentes de la base General Morillo aseguran que en su expediente médico no aparece reflejada ninguna patología de este tipo. Los militares se someten de forma periódica a reconocimientos para controlar su estado de salud.
En el deporte
La muerte súbita no afecta solo a personas a las que les han diagnosticado enfermedades cardíacas. Ese era el caso del futbolista Antonio Puerta, que falleció con 22 años en el terreno de juego del Sevilla, y de Dani Jarque, del Espanyol, que falleció con 26 años.
El cabo primero Ucha Montero llevaba dos decenios en la base General Morillo de la Brigada de Infantería ligera aerotransportable (Brilat) de Figueirido y era natural de Pontevedra. Desde hacía unos años estaba destinado en el batallón del cuartel general en la sección de la policía militar.
Lo sucedido causó gran conmoción en la base militar, ya que el triste incidente ocurrió al término de la sesión deportiva diaria. Pablo Ucha empezó a sentirse mal tras la última prueba del entrenamiento, que consistía en una carrera. El fallecido no formaba parte del contingente que acaba de regresar de la misión de Afganistán.