Las Rías Baixas se confirman como la gran cantera de los festivales gallegos

El verano va camino de quemar ya toda su mecha y los festivales de música continúan dando la campanada en las Rías Baixas. Lo hizo este fin de semana uno de los más jóvenes, el Río Verbena Fest, con epicentro en Pontevedra, que dejó estampas del recinto ferial a tope y la sensación de que estas citas musicales son un enorme tirón para el turismo. Así lo dijo desde la zona cero de la fiesta el propio alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, que indicó que la cita está ya consolidada en el calendario festivo gallego pese a no contar con más de tres años de historia, que en el 2025 volverá a celebrarse y que su éxito se tradujo en un llenazo en los hoteles.

Se consolida así, por tanto, el Río Verbena Fest y con su incorporación se confirma lo que ya estaba claro: que las Rías Baixas son la gran cantera de los festivales gallegos, y que aquí triunfan tanto los de larga trayectoria y que cambiaron de ubicación, como el caso del Portamérica y también los de nuevo cuño como este último. Así como las grandes citas y las que son de tamaño mucho más reducido.

Precisamente, en este verano al que costó que llegase el sol en el mes de julio, dio la sensación de que el estío no arrancó de verdad hasta que se encendieron las luces de la Azucreira de Portas y se inauguró el Portamérica. Luego vinieron las otras grandes citas festivaleras que salpican las Rías Baixas; desde el Atlantic Fest de Vilagarcía al Sinsal de la Illa de San Simón, el SonRías Baixas de Bueu, O Marisquiño de Vigo y ahora el Río Verbena Fest. Y la cosa no para ahí, porque en Vilaxoán (Vilagarcía) están calentando ya motores para el Revenidas, que tendrá lugar desde el 12 al 15 del mes de septiembre y que cuenta en el cartel con artistas como Fillas de Cassandra, Dakidarría, Tanxugueiras, Rebeliom do Inframundo o Muchachito Bombo Infierno. Hay abonos actualmente a la venta por 63 euros y entradas diarias a precios de 33 y 38 euros, según la jornada.

Triunfan los festivales en las Rías Baixas pese a que todos los grandes son de pago y a que acudir suele suponer un desembolso a mayores en bebida, porque está prohibido entrar con latas o botellas tapadas. Quizás por ello se suele ver más a adultos e incluso familias enteras que a adolescentes festivaleros. Aunque todo depende del cartel, porque en el Portamérica con Aitana en el escenario se le dio la vuelta a la tortilla y el festival rejuveneció sobremanera, con miles de niños y jóvenes cantando fuerte. Eran Las babys dándolo todo.