Retirada de los quioscos que gestionó Cogami en el centro de Pontevedra
Pontevedra
Las instalaciones estaban sin uso desde el año 2015
03 Oct 2024. Actualizado a las 05:00 h.
Los quioscos que en su día gestionó Cogami en el centro de Pontevedra ya son historia. Tras casi una década sin uso —cerraron en el año 2015— esta semana se está llevando a cabo su retirada, algo que el Concello venía demandando desde hace tiempo a la empresa que actualmente es la propietaria de estas estructuras. Concretamente, sobrevivían tres de estos quioscos: en Rosalía de Castro, en la Praza de Galicia y en la avenida de Vigo.
Dada la imposibilidad de recuperar el uso de estas instalaciones el Concello pidió su retirada para evitar la sensación de abandono que presentaban y poder recuperar el espacio público que ocupaban en distintos puntos de la ciudad.
Estas casetas dejaron de funcionar en el año 2015 debido a la quiebra de la Rede Galega de Quioscos, una empresa que dependía de Cogami. En su día llegó a haber una red de seis quioscos en la ciudad gestionados por esta sociedad: los tres citados más uno ubicado en la esquina de la calle Sierra con Padre Amoedo, otro en la plaza de Barcelos y el de la avenida de Bos Aires, que daba servicio a la playa fluvial de Lérez.
El Concello trató de reabrir el de la playa fluvial y el de Barcelos, convocando sendos concursos para su explotación, ya que en estos casos la instalación no pertenecía a la citada Rede Galega de Quioscos, sino que son municipales.
Tras la quiebra de esta empresa, las instalaciones de su propiedad se vendieron a un tercero durante el proceso concursal. Fue con este con el que el Concello entabló hace tiempo conversaciones para retirar los quioscos que permanecían sin uso en las calles del centro urbano.
La exigencia del gobierno local se retomó con el arranque de este nuevo mandato municipal en el que alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores (BNG), dio orden de poner en marcha un plan de mejora y acondicionamiento del espacio público eliminando objetos en desuso. Fruto de este plan se retiraron una veintena de cabinas telefónicas y se iniciaron expedientes para eliminar más de treinta vallas publicitarias. Además, se retomaron las conversaciones sobre los quioscos, que al fin han fructificado.