Los famosos se borran del mapa
Ocio@
Tony Blair o Paul McCartney han solicitado a Google que eliminen sus casas del servicio «Street View»
08 Jul 2014. Actualizado a las 23:01 h.
Cada vez son más las celebridades que han solicitado a Google Maps que borre o difumine la imagen de su casa del servicio de Google Street View. Los curiosos que utilizaban este mapa online para curiosea las direcciones de los famosos ya no podrán hacerlo más, al menos las de un gran número de ellos.
Google ya ha comenzado a eliminar ciertas direcciones ante el incremento de solicitudes por parte de distintas personalidades, lo cual no impide ver el resto de la calle donde se ubican las célebres viviendas. Como ha comprobado el diario británico The Telegraph; famosos como Paul McCartney, el ex-presidente británico Tony Blair, o la cantante Lily Allen ya han difuminado la fachada de sus respectivos hogares de este mapa en tres dimensiones.
El guitarrista de Led Zeppelin, Jimmy Page, también ha querido difuminar la imagen de su casa al oeste de Londres y la mezzosoprano galesa, Katherine Jenkins ha eliminado del Google Street Viewer su mansión en Surrey.
Pero algunas de estas celebridades no buscan únicamente privacidad, el ex jefe del Banco Real de Escocia, Fred Goodwin, perdió el título de caballero en el año 2012 al estar involucrado en diversos escándalos financieros, por lo que seguramente haya ocultado su mansión de 3 millones y medio de libras para evitar situaciones incómodas o represalias de algún tipo.
El efecto Barbra Streisand
Aunque solo se difuminan los hogares de los famosos que lo solicitan, la medida no parece muy efectiva si tenemos en cuenta que el fin principal de los que solicitan el servicio es salvaguardar su intimidad. Si por ejemplo, en una zona residencial de Los Ángeles o una exclusiva calle de Londres vemos un edificio borroso entre un montón de viviendas perfectamente visibles, significará con mucha seguridad que hemos encontrado el hogar de alguna celebridad.
Los famosos y destinatarios de este servicio corren el riesgo de sufrir el llamado «efecto Streisand», llamado así a raíz de la denuncia que la cantante y actriz impuso en 2003 a un fotógrafo por publicar imágenes de su mansión de Malibú, solicitando al demandado 50 millones de dólares por violar su intimidad, a pesar de que se trataba de una imágen aérea de la costa donde estaba ubicada la casa.
Antes de hacerse pública la denuncia la imágen fue descargada en seis ocasiones, dos de las cuales correspondían al abogado de Streisand. Tras conocerse el motivo de la demanda, la imágen capto mucha más atención y la fotografía que tanto pretendía ocultar la artista fue descargada más de 420.000 veces.
Además perdió el juicio y no solo no logró la indemnización millonaria que solicitó, sino que además multiplicó el interés público por conocer el aspecto de su mansión, algo que puede ocurrirles ahora a los famosos que tratan de ocultar sus moradas del omnipresente Google.
No es un servicio exclusivo para famosos
La opición de difuminar la fachada del edificio en el que vives o de tu vivienda no es exclusivo para una élite mediática. De hecho, cualquier persona que lo desee puede solicitar que su domicilio desaparezca del mapa online.
Google facilita la correción de cualquier error relacionado con la falta de intimidad al ser consciente de la enorme covertura que ofrece su servicio de mapas en tres dimensiones. Si tenías la puerta del garaje de tu casa abierta cuando pasaba el coche de Google o simplemente te incomoda que tu calle y tu casa puedan localizarse con tanta facilidad, puedes imitar a los famosos y difuminar tu hogar.
En primer lugar debes ubicarte en la dirección de tu casa dentro de Google Street View, y pulsar la opción de «Informar de un error», que está situada en la esquina inferior derecha de la pantalla. El siguiente paso será especificar que deseamos difuminar e indicar nuestro correo electrónico, por lo que la tramitación de este tipo de solicitudes es considerablemente sencilla.
Aunque no debemos olvidar que seguramente provoquemos el efecto contrario -efecto Streisand- así que es más recomendable dejar estas excentricidades para los famosos.