Ordes rescata en una muestra la memoria del «Prestige»

Prestige, crónica negra dun modelo enerxético insostible es el título de una exposición abierta hasta el 4 de noviembre en la primera planta de la Casa Consistorial ordense, una muestra cedida por el Centro de Extensión Universitaria e Divulgación Ambiental de Galicia (Ceida).

La muestra explica en catorce paneles informativos toda la problemática ambiental originada por este petrolero, tareas de limpieza, daños y consecuencias. Está abierta de 8 a 15 horas.

El Prestige era un buque petrolero monocasco de Liberia, que operaba bajo bandera de Bahamas y que el 19 de noviembre de 2002 se hundió frente a las costas de Muxía, ocasionando un vertido de fueloil que provocó uno de los mayores desastres ecológicos de la historia del país.

El 13 de noviembre de 2002 el barco se encontraba transitando, con 77.000 toneladas de fueloil a 28 millas de Fisterra, cuando se vio inmerso en un temporal y sufrió una vía de agua. El 19 de noviembre, tras intentar alejarlo de la costa, se partió en dos a las 8 de la mañana, hundiéndose a una profundidad de 3.850 metros. El petrolero, que estaba en ese momento a unos 250 kilómetros de la costa, provocó las primeras manchas negras en las rías, la invasión de chapapote.

La parte afectada de la costa no solo tenía gran importancia ecológica, sino también una notable industria pesquera, que se vio seriamente dañada. El 2 de enero de 2003, las manchas de combustible estaban a 50 kilómetros y, posteriormente, alcanzaron de lleno la costa originando un desastre ecológico de grandes proporciones.

Desde el desastre, los petroleros similares al Prestige han sido apartados de la costa francesa y española. La entonces comisaria europea de Transporte, Loyola de Palacio, consiguió también la prohibición en toda la Unión Europea (UE) de los petroleros monocasco.

crónica la catástrofe ecológica