Compostela Aberta y BNG ven un alcalde sin ambición con Feijoo y el PP pide agilidad a Bugallo

La máxima de Xosé Sánchez Bugallo de que es preferible escoger uno mismo las cuestiones que quiere abordar con una administración superior que llegar con un amplio abanico temático que dé pie al interlocutor a fijar sus propias prioridades no convence a la oposición. No al menos a los grupos de izquierda, los que lideran Martiño Noriega (Compostela Aberta) y Goretti Sanmartín (BNG). Ambos echaron en falta proyectos de interés que trascienden al Xacobeo y a las infraestructuras generales en la agenda que el regidor le presentó anteayer al presidente de la Xunta.

El PP no incide expresamente en la ausencia de otras cuestiones «tamén de interese», aunque sí espera iniciativa y agilidad municipal con las que centraron el encuentro. Porque está bien advertir «sintonía» y conocer «os posicionamentos», pero, sobre todo, saber qué hará el Ayuntamiento desde su ámbito competencial para avanzar en una cuestión tan de interés para la ciudad como para la propia Xunta: su industrialización.

«Estaremos atentos a ver cal é a iniciativa do Concello con independencia de pedir á Xunta que colabore nese impulso», porque «todos sabemos -dice Agustín Hernández- onde están os problemas: na falta de axilidade para as licenzas e nas ferramentas de axuda no ámbito competencial do Concello». Expectante estará también con la reforma de Clara Campoamor, pero sobre todo con los plazos, porque «a Xunta está cumprindo coa súa parte».

Compostela Aberta vio a un alcalde «máis atento de colocarse para a foto que de levar propostas concretas», decía la formación en sus redes sociales, en las que recordaba las «30 liñas» de actuación que Noriega llevó bajo el brazo a uno de sus encuentros con Feijoo, al tiempo que indicaba a Bugallo que «cordialidade non significa submisión». Pero el regidor afirma que ese encuentro marca una línea de trabajo y que muchas de las cuestiones de ciudad, ya fuesen objeto o no de esa entrevista, se canalizarán a través de las consellerías. Y ve a Noriega «vivindo aínda no relato de que el arreglou a EDAR, e non sei o que arranxou».

Si Feijoo se esmeró en relatar ante Bugallo la acción de la Xunta ejecutada y programada en la ciudad, el BNG hizo lo propio con los asuntos que llevan demandando desde hace años y que no habrían llegado a una reunión «pouco ambiciosa» donde el Xacobeo «opacou» otras prioridades: la nueva escuela de idiomas, el Conservatorio, viviendas, las necesidades del rural y los aparcamientos disuasorios, entre otras.