Bando recibió 1.021 animales en el 2023, el peor registro en once años

La Fundación Refuxio de Animais, que desde el año 2005 se encarga en Compostela de recoger y promover la adopción de animales abandonados, fundamentalmente perros y gatos, cerró el año 2023 con uno de los peores datos de su historia, ya que entre enero y diciembre del año pasado llegaron a Bando 1.021 animales (556 perros, 459 gatos, tres palomas y tres animales más registrados como otros). De todos ellos, solamente 201, es decir un 20 %, disponían de microchip, un sistema de identificación obligatorio por ley para las mascotas. En el mismo período consiguieron adopciones para 200 perros y 261 gatos. Y solamente 272 animales fueron recogidos por sus dueños.

Esta cifra de entradas supone una triste escalada respecto a la historia reciente de Bando, ya que hay que remontarse al año 2011 para encontrar un registro superior, con 1.113 animales recibidos. Además, el del 2023 es el quinto peor de toda la historia, solo superado por las 1.133 recogidas del 2008, las 1.190 del 2009 y las 1.324 del 2010 (el peor año de todos).

La fundación que gestiona el refugio, y de la que forman parte los concellos de Santiago, Brión, Boqueixón, Vedra, Teo, Touro, Val do Dubra, Trazo, Dodro y Padrón, contabilizada cada entrada, y de su último informe destacan las cifras de animales procedentes de Teo (83) y Padrón (79).

A la hora de hacer balance del 2023, Olalla García, directora del Refuxio de Bando, lo resume con una única palabra, «terrible», tanto por el volumen de abandonos como por la saturación que se produjo durante los meses de verano, sobre todo con camadas de gatos que tuvieron que atender, aunque también les llamó la atención la cantidad de crías caninas que recibieron.

El mes de junio fue el peor de todos, recuerda, ya que si en años anteriores se alcanzó la cifra de 96 entradas, en el 2023 se llegó a 169 un número que nunca se había dado en toda la historia de Bando. Y ¿cómo se consigue atender a tantos animales, muchos de ellos cachorros y que pueden tener muchas enfermedades? «Pois non o sei moi ben, pero foi posible cun sobre esforzo de todos e grazas ao traballo das persoas que fan acollidas», responde. Este último colectivo atiende en estos momentos a 82 animales en sus hogares. Sin ellos y sin las personas voluntarias, insiste Oalla García, el trabajo en el Refuxio de Bando no podría realizarse.

El dato preocupante de 169 entradas de animales, muchos abandonados, no es el único, ya que en julio fueron 104, 111 en agosto, 103 en septiembre y 107 en octubre.

A la hora de buscar explicaciones la directora del Refuxio de Bando lo tiene claro: la concienciación de respeto a los animales es nula en demasiadas personas y la subida de precios de la comida de las mascotas no es asumible para algunos propietarios. El temor y el desconocimiento de la nueva ley se añade a las causas. Que los concellos no tengan servicio de lacería es otro de los problemas que agrava la saturación del refugio, que el año pasado recibió 251 perros y 21 gatos que, felizmente, fueron reclamados por sus dueños.

Ames envió el año pasado 77 mascotas a Cambados y su plan CER esterilizó 76 felinos

Si bien el refugio de Bando es la principal opción de los concellos del área metropolitana para enviar a los animales abandonados en sus respectivos términos municipales, Ames optó por una solución alternativa en el año 2012. Y desde el 2017 los envía al refugio de Cambados, cuyas últimas estadísticas no se corresponden a anualidades completas pero confirman por su número que el problema del abandono también está muy presente en este municipio y que la evolución no es positiva.

Durante el año 2022, el Concello de Ames envió a Cambados a 18 gatos, 22 perros y un hurón, mientras que la estadística del 2023, que incluye datos detallados hasta agosto, constata que fueron recogidos 34 gatos y 19 perros. Y la cifra global de todo el 2023 sube a 77 animales abandonados, es decir 24 más entre septiembre y diciembre.

Ames también está aplicando el programa CER, de esterilización de gatos que viven en colonias controladas. Entre septiembre del 2021 y el 2022 castraron a 19 hembras y 12 machos. Entre el mismo período del 2022 y el 2023 esterilizaron a 28 hembras y 17 machos.