Una batalla perdida contra los vertidos incontrolados en el monte y las pistas

Es una batalla perdida. Por más medios que se pongan para que la basura no acabe en el monte o en la cuneta de una pista, siguen apareciendo vertidos incontrolados que atentan contra el medio ambiente. Los ejemplos se multiplican semana tras semana en el área de influencia de Compostela y desde los concellos hacen frente a un fenómeno que intentan atajar con distintas estrategias. Ya no se trata solo de intervenir para paliar los efectos contaminantes sino que, además, implica un despliegue de medios y de personal continuo, explican desde los servicios municipales, que no llegan a entender cómo se continúan arrojando colchones, electrodomésticos, muebles y enseres de todo tipo en mitad de la naturaleza cuando existen servicios gratuitos que recogen esos voluminosos a domicilio. Basta una simple llamada para que vayan a retirar este tipo de desperdicios a la puerta de casa o al contenedor de residuos urbanos más cercano, pero aún así muchos se toman las molestias de cargarlos ellos mismos, transportarlos y abandonarlos en algún terreno alejado.

En esta lucha también está implicada la Consellería de Medio Ambiente e Cambio Climático, que en los últimos años, dentro de sus programas de inspección, incluye acciones en puntos de vertidos incontrolados que se ejecutan en colaboración con la Unidad de Policía Nacional Adscrita de Galicia (UPA). «O obxectivo é localizar os puntos afectados, nos que se identifican a natureza, estimación cuantitativa e coordenadas xeográficas dos residuos atopados e, se é posible, a súa orixe. Así mesmo, realízase unha comprobación da restitución dos terreos afectados ao seu estado orixinal, comprobación que se fai sempre no prazo dos dous anos seguintes á intervención», indican. Entre el año pasado y lo que va del presente 2024 se realizaron un total de 155 actuaciones de este tipo en las comarcas de Santiago, Sar, A Barcala, Ordes, Arzúa y Terra de Melide. La mayor parte de las veces, suelen encontrar material asimilable a residuos urbanos, por lo que se comunica el resultado de estas inspecciones a los concellos, por ser de su competencia.

En ayuntamientos como Teo o Brión, reciben de media al menos un aviso a la semana por la aparición de nuevos vertidos incontrolados. «Notamos que proliferan sobre todo en puntos limítrofes con outros concellos, normalmente en camiños de monte, estradas antigas polas que xa non se pasa tanto porque hai outras mellores, especialmente no caso dos escombros», explica el concejal de Medio Rural brionés. Un ejemplo es la localidad de A Telleira, donde aparecen recurrentemente muchas ruedas y restos de defensas de coches; este año incluso encontraron escombros con uralita y amianto, un residuo peligroso que debería gestionarse de forma especial y depositarse en instalaciones autorizadas para su tratamiento.

Campañas y más recursos

El Concello de A Baña, por su parte, está llevando a cabo una intensa campaña de sensibilización, denunciando a través de las redes sociales estos hechos cada vez que suceden. El último vertido fue hace 17 días, cuando hallaron restos de ropa, televisores y sillas de oficina en medio de la naturaleza. Aunque los vertidos aparecen diseminados y de forma puntual, «isto non só supón un atentado contra o medio ambiente senón que prexudica a imaxe do municipio e tamén os esforzos da veciñanza por manter un entorno limpo e saudable», subraya el alcalde, José Antonio Pereira.

También les llegan avisos esporádicamente a los concellos de O Pino y Rois, donde instalan señalética a pie de terreno para concienciar a la población. En Rois hay señales informativas que advierten de la prohibición de tirar escombros y otro tipo de residuos voluminosos, recordando que está penado con una sanción mínima de 900 euros y máxima de 1.750.000 euros. «Manter o concello limpo é responsabilidade de todos e de todas», reivindican estos mismos pasquines, donde figuran asimismo los teléfonos a los que se puede llamar para la recogida de enseres voluminosos (639 107 638) y de material electrónico (981 804 109).

En Padrón están desenvolviendo ahora una campaña para implantar el contenedor marrón. Y, en O Pino, cuando detectan un punto afectado, además de retirar la basuraleza (generalmente restos de obras o reformas), colocan allí carteles para concienciar y recordar los recursos disponibles. En su caso, además de ofrecer la recogida de voluminosos y entrega en el punto limpio de Pazos (Arca), tienen un servicio que acude a las explotaciones para hacerse cargo de los plásticos agrícolas (639 200 2041) y hay dos remolques que van por las parroquias (uno o dos días al mes) y sirven de puntos limpios móviles para que depositen allí sus pilas y baterías, aceites vegetales, tóner, bombillas y fluorescentes, objetos electrónicos, aerosoles...

En Teo, junto con el punto limpio de A Lagoa, han dispuesto minipuntos limpios, situados en enclaves urbanos que facilitan también el depósito de pequeños objetos. Además, este concello cuenta con recogida de podas y voluminosos puerta a puerta. Aún así, aparecen en pistas forestales numerosos residuos, principalmente en pistas de concentración parcelaria donde es difícil ver quién tira esa basura. Los avisos para la retirada los hace el propio departamento local de Medio Ambiente, la Policía Local o los ciudadanos. La empresa adjudicataria del servicio de recogida de residuos sólidos urbanos y limpieza viaria pasa a realizar una inspección de campo y, al tratarse de pistas forestales de dominio público, la retirada corre a cargo del propio Ayuntamiento. En este 2024 han realizado más de 30 intervenciones de este tipo a lo largo de los últimos nueve meses.

Santiago unifica la recepción de avisos para dar una mejor respuesta

El Concello de Santiago recibe los avisos de vertidos o abandono de residuos por diferentes canales, por lo que pretende unificar esa recepción de comunicaciones a través de una sola vía con la nueva web de santiagosostible.gal para que poder ofrecer una respuesta más rápida y hacer un seguimiento de las incidencias. En este momento los avisos de la ciudadanía llegan a través de Liña verde (app para el móvil), del registro general del Ayuntamiento y de llamadas telefónicas al departamento de Medio Ambiente, a Urbaser o a la Policía Local. Cuando el vertido está en pistas o caminos rurales, la denuncia entra por sede electrónica (la Policía Autonómica da el aviso).

Además de existir dos puntos limpios (en Piñor y Tambre) hay dos minipuntos limpios móviles que son a su vez soporte para una campaña informativa («Que ben que vén» explica dónde, cómo y cuándo depositar los residuos), además de tener un tercer punto limpio móvil para residuos de gran tamaño. Al margen de todo ello, la empresa Urbaser se encarga de la recogida de voluminosos previa cita en Compostela (recibió 14.061 peticiones).