Santiago esquiva la suerte en la lotería de Navidad y solo un cuarto deja décimos premiados
Santiago
El 77768 se despachó en el centro comercial de As Cancelas así como en Vedra, Touro, Teo y Val do Dubra
22 Dec 2024. Actualizado a las 20:25 h.
En Santiago hay muchas tradiciones y una de ellas es que la lotería de Navidad, en líneas generales, no suele dejar grandes fortunas en la capital de Galicia. Este 22 de diciembre no quiso ser menos y en Compostela y sus municipios limítrofes no hubo lluvia de millones. Fue uno de los dos cuartos premios, el 77768, precisamente uno de los más repartidos, el que más alegrías dejó en la ciudad, con décimos vendidos en el centro comercial de As Cancelas y en los concellos de Vedra, Val do Dubra, Touro y Teo.
Aunque los domingos, sobre todo por las mañanas, As Cancelas vive unas horas de tranquilidad absoluta y cierre de locales, en este caso no fue así. La inminente llegada de las fiestas navideñas anima a abrir todas las tiendas y también la administración número 16 de Santiago, ubicada en la planta baja, subió la verja en esta jornada dominical. Minutos después de que los niños de San Ildefonso cantasen el cuarto premio, Eva Barreiro colocaba los carteles afortunados, ya que en este local se vendió una serie entera, 200.000 euros, 20.000 euros para cada décimo.
Poco después llegaba el responsable del negocio, Manuel Blanco, quien el año pasado había recibido ya un alegrón. Lleva seis años al frente de esta administración que en el 2023 vendió un décimo del gordo. Feliz de repetir, este compostelano recuerda cómo casualmente son números a los que los clientes son reacios, «o ano pasado tiñamos unha serie do gordo e ninguén o quería, e esta vez algún usuario díxonos agora, ‘eu vino, non o collín polo feo que era e mira ao final'».
A lo largo de estos seis años Manuel ha dado casi un millón de euros de una bonoloto y pequeños premios de aquí y de allá, «este pellizquiño de hoxe alégrache o día», admite. Nunca había regentado una administración de lotería y aunque es una lucha diaria porque los gastos suben mientras las comisiones llevan 17 años congeladas, asegura que se dedica a una actividad que reparte ilusión, lo que siempre es motivador.
Don Manolito, un guiño a doña Manolita, surgió tras un debate entre sus hermanos pensando en cómo llamar a este establecimiento, «era o típico diminutivo co que te chaman na casa porque somos catro irmáns e dixemos: veña, don Manolito».
Este cuarto premio estuvo muy repartido y también dejó pellizcos en otras localidades del área compostelana, en concreto en Teo, Vedra, Touro y Val do Dubra. En este último concello fue en la administración de la cafetería Reyva, en Bembibre, en donde casualmente como en el caso de As Cancelas el año pasado también vendieron varios décimos del gordo, el 88008. En esta ocasión, explican desde el establecimiento, se despacharon dos billetes por máquina y tampoco saben quiénes pueden ser los agraciados porque se trata de un local que recibe a muchos usuarios de paso. Lo cierto es que esta cafetería está tocada por la fortuna porque en los últimos años ha vendido varios quintos, así como premios altos de otros sorteos.
Arturo Varela heredó el negocio de sus padres y vendió dos billetes
Arturo Varela y su mujer, Cristina Dono, vendieron dos décimos del mismo cuarto premio, el 77768. Lo que ahora es un estanco y administración en Calo, en el concello de Teo, en un principio también fue bar, que regentaron sus padres hasta dejarle a él el negocio, «isto está aquí desde que teño uso de razón», cuenta feliz de haber dado estos dos décimos, que no sabe a dónde se han ido. «Os clientes son en gran parte veciños do lugar, pero como estamos na nacional 550 pode ser de calquera persoa que parase».
Cogió el testigo a sus padres en el año 2016 y justo ese año dio casi 800.000 euros en una bonoloto. También recuerda alguno de los premios más jugosos que repartieron sus progenitores, como los 114 millones de pesetas justo en el año en el que desaparecía la vieja moneda. En estas fechas, dice, juega la mayoría de gente, «porque estes xogos de azar gustan, nós tamén xogamos nesta lotería de Nadal». Ellos también, aunque en este caso les haya tocado a otros.