Absuelven a la antigua directiva de una cooperativa de A Baña de apropiarse de 79.000 euros

Los cuatro miembros de una misma familia a los que la Fiscalía acusaba de apropiación indebida durante la etapa en la que, entre el 1 de mayo del 2006 y el 13 de diciembre del 2011, conformaron la directiva de la cooperativa San Xoán de Barcala, con domicilio social en A Baña, han sido absueltos tras el juicio que la semana pasada se celebró en la sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña. El ministerio público pidió para cada uno de ellos dos años y medio de cárcel, 1.440 euros de multa y que indemnizasen a la entidad devolviéndole conjunta y solidariamente los 79.016 euros que aseguraba que se habían quedado de sus fondos.

Sin embargo, los magistrados no han visto pruebas del delito del que se les acusaba y solo cuatro días después de la vista oral han dictado sentencia absolutoria. La resolución solo aprecia una gestión «poco profesional» pero en la que no consta que el dinero retirado de las cuentas de la sociedad se destinase a cuestiones diferentes a las que eran el propio ámbito de su actividad.

Los hechos probados relatan que, cuando los cuatro familiares ahora absueltos pasaron a integrar el consejo rector de la cooperativa, adquirieron el compromiso de gestionarla «particularmente en lo que respecta a su capacidad para afrontar las deudas contraídas, asumiendo el pago en el caso de que no dispusiese de liquidez suficiente en el momento de los vencimientos de la deuda». Los nuevos socios debían sanear la sociedad en el plazo de diez años y dejarla libre de cargas bancarias y laborales.

Deficitaria desde el 2006

La cooperativa, que inició su actividad en 1987, en el 2006 era deficitaria. Durante su gestión, añade la resolución judicial, los acusados aportaron maquinaria de su propiedad y 46 vacas a las existentes en la granja. Llevaron, aprecia el tribunal, «una dirección poco profesional en la que trabajaban a diario en la producción de leche» y únicamente realizaron la contabilidad formal de los años 2006 y 2007. Sin embargo, entiende que no tuvieron «intención de beneficio económico propio distinto de la explotación pactada» y que «fueron pagando los créditos contraídos por la directiva precedente», de ahí que les absuelvan del delito de apropiación indebida del que les habían acusado.

Mientras integraron la directiva, ingresaron en las cuentas de la entidad agraria bañesa subvenciones y ayudas públicas concedidas «sin que tampoco conste que destinaran el dinero a fines diferentes del funcionamiento de la cooperativa, que era su modo de vida». También pidieron préstamos bancarios en nombre de la sociedad «sin adueñarse del dinero obtenido para sí mismos», relata la sentencia de la Audiencia Provincial, que añade que «hasta el 13 de diciembre del 2011 en que cesaron los cuatro investigados hicieron ingresos y retiraron en efectivo y por transferencias» fondos de la cuenta común «que, en parte, provenía de los rendimientos de la explotación ganadera, sobre todo de la venta de leche y ganado, sin que conste un destino diferente al tráfico y ámbito de la cooperativa y las obligaciones contraídas al asumir la gerencia».

Los magistrados consideran que «el ensamblaje de medios personales, documentales y periciales no permite la construcción cierta de un juicio de coautoría en el delito único calificado por las acusaciones y lo imperativo es decretar la absolución de los cuatro inculpados». También censuran la demora en la tramitación de los autos, ya que los procesados comparecieron por primera vez en el juzgado de instrucción de Negreira el 4 de octubre del 2012, por lo que han pasado doce años hasta que el caso ha llegado a juicio.