El penúltimo tren para acabar el año ennoviado: la fiesta de «singles» que busca formar 70 parejas en Padrón

¡Atención solteros! Este mes saldrá el penúltimo tren para acabar el año ennoviado, para aquellos que quieran darle una oportunidad al amor. El Hotel Scala de Padrón acogerá el sábado 18 de noviembre, a partir de las nueve de la noche, una fiesta para singles. Los organizadores son los mismos que revolucionaron Celanova allá por abril con su célebre Gran Feria del Amor, que desbordó todas sus previsiones. Esperaban en aquella ocasión a un centenar de personas, pero acabaron reuniendo a más de 300 llegadas de toda Galicia, incluso de otras comunidades autónomas (Asturias, León, Madrid, Castilla y León...), y surgieron varias parejas consolidadas.

«De allí salieron 22 parejas, que nosotros tengamos constancia. Y ahora queremos formar unas 70 porque esperamos llegar a los 500 asistentes», dice Julio Gosende, un empresario celanovés dedicado al mundo del mueble, un amante de su tierra y divulgador de sus recursos que se asoció con un amigo de A Coruña del sector de las antigüedades, José María. Cuentan que decidieron convocar una segunda edición antes de acabar el 2023 «por petición popular». «La gente nos insistía muchísimo después del éxito de la primera fiesta, que fue una locura, y la trasladamos esta vez a Padrón porque está estratégicamente situado en el centro de Galicia y es una forma de facilitar que acudan muchos sin recorrer tantos kilómetros como en la pasada ocasión», añade Gosende.

El plan del día 18 incluye cena (con empanada, jamón, queso, hojaldritos, croquetas, mejillones, boliños preñaos, brochetas de rape con langostinos, solomillo ibérico, postres, vinos, café y chupitos), música y baile por 69 euros; con la posibilidad de reservar habitación y desayuno para uno por 50 euros, doble por 75 y triple por 90. Contarán con la discoteca móvil Dolce Vita de Portonovo y podrían ampliar el cartel en función de la cantidad de reservas. ¿Y a quién va dirigida la fiesta? «La media de edad de la primera estuvo entre los 40 y 50 años, aunque había solteros desde 28 hasta 70. La mayoría eran divorciados, y algún viudo. Y hubo más mujeres que hombres, algo que parece que se va a volver a repetir por las personas que llevamos anotadas hasta ahora», responde Julio, quien aclara entre risas que tanto él como su socio están fuera del mercado.

Su aventura como celestinos surgió el verano pasado en Panxón, relata: «Vi en verano en La Voz de Galicia una pareja que se había conocido en una fiesta de solteros en Foz y se casaba. Mi socio me propuso hacer algo así porque sabe que yo muevo a bastante gente porque llevo haciendo la Feria de la Oportunidad y Antigüedades 18 años, entre otros eventos para dinamizar el comercio local». La fórmula de la segunda fiesta para singles será la misma que en Ourense y los resultados dependerán de los caprichos del amor. Hagan sus apuestas.