El idioma como excusa
Santa Comba
20 Jul 2016. Actualizado a las 05:00 h.
Cuando uno sale de Madrid hacia el norte puede ver en los enormes paneles indicadores de la A-6 y en letras gigantes «A Coruña». Sí, así, en gallego. Porque, para los que no lo sepan, el Estado español solo reconoce como oficiales los topónimos en la lengua de Rosalía. A Coruña y Ourense solo aparecen así en los papeliños del Gobierno, en las señales o en las matrículas de los coches. Ante esto, pensábamos que el asunto lingüístico, el del respeto a la lengua y a la cultura propias de Galicia, era un asunto cerrado. Asumido. Pero parece ser que no del todo. El Instituto de Diversificación y Ahorro Energético (IDAE), dependiente del Ministerio de Industria, acaba de denegar jugosas ayudas económicas para proyectos de los concellos de Santiago, Teo y Santa Comba alegando que un par de folios de los extensos expedientes estaban redactados en gallego. En concreto, los escritos galaicos que ofendieron al funcionario castellano eran los informes de los departamentos de Intervención. Pese a que después los ayuntamientos, en sus alegaciones, remitieron en un perfecto español los documentos de la discordia, el IDAE dice que el error no es subsanable porque entiende que Santiago, Teo y Santa Comba no erraron, sino que enviaron los papeliños en gallego por amolar. Alucinante. Aplicando el beneficio de la duda, prefiero creer que en el ministerio han querido ahorrarse unos cuartillos y que han puesto la supuesta ofensa a Cervantes como excusa. De otro modo, habría que pensar que son bobos de remate y que no tienen ni idea del país de países en el que viven. Así, en castellano.