El volcado del móvil de Óscar García Lema, clave para saber qué hizo y con quién habló antes de su desaparición en Teo
Teo
La Guardia Civil cuenta en Pontevedra con agentes especializados para poder acceder a toda la información del dispositivo, que incluye WhatsApp, llamadas, correo electrónico e incluso aplicaciones con GPS
13 Apr 2023. Actualizado a las 17:25 h.
Hoy se cumplen dos semanas sin noticias de Óscar García Lema. 14 días sin novedades, pero con todas las incógnitas aún encima de la mesa. La Guardia Civil del puesto de Milladoiro y la Policía Judicial de Santiago mantienen la búsqueda activa, pero divida en dos frentes: el primero, sobre el terreno; el segundo, desde la sombra. Después de 14 infructuosas jornadas recorriendo Teo, Vedra, Ames o Santiago, la esperanza se cierne sobre el estudio del teléfono móvil del desaparecido, que dejó cargando antes de salir de su casa en el lugar de Cepeda, Teo, el pasado miércoles 29 de mayo.
La Guardia Civil cuenta con un equipo especializado en Pontevedra para hacer el volcado de toda su información. Gracias a él, la Policía Judicial de Santiago podrá acceder a sus conversaciones de Whatsapp o Telegram, así como al correo electrónico, mensajes de texto, registro de llamadas, imágenes e incluso localizaciones, esto en el caso de que hubiera utilizado alguna aplicación con GPS como Google Maps.
Será posible siempre que no haya borrado al completo el dispositivo, llevándolo a su estado de fábrica, algo que, sin embargo, evidenciaría una premeditación en sus actos, cuestión que se desconoce. En el caso de que eso hubiera ocurrido, los agentes también pueden solicitar a las compañías de telefonía los registros de los repetidores a los que se conectó el dispositivo. Se trata de una manera mucho más enrevesada, que requiere más tiempo y que es menos precisa, ya que marca los puntos en los que se encuentran los repetidores y no la ubicación del móvil en sí, aunque sí permitiría trazar el camino que recorrió.
Sin rastro
De lo que comienza a haber menos dudas es de que Óscar García Lema no se encuentra en Teo. Lo consideran así miembros del operativo de búsqueda que, en 14 días, no han encontrado ni el más mínimo rastro del empresario compostelano. La zona cero —área de un radio de unos cuatro kilómetros con epicentro en su vivienda— se ha inspeccionado en hasta cuatro ocasiones. Pero no solo eso. A lo largo de estas dos semanas centenares de voluntarios han mirado en zanjas, cunetas, escampados, prados, viviendas y edificios abandonados. En la zona ha estado la Guardia Civil del puesto de Teo, acompañada de Policía Local, Servicio de Emergencias Municipal y Protección Civil. También se ha desplegado el helicóptero del instituto armado, el equipo de perros adiestrados para seguir rastros humanos y los drones de la Axencia Galega de Emerxencias (Axega).
El último rastreo sobre el terreno en Teo se llevó a cabo en varios lugares de difícil acceso y en los márgenes del río Ulla, donde tampoco se vio nada, lo que motivó el salto de la búsqueda al municipio vecino de Vedra, así como a Santiago de Compostela o Ames, donde han estado buscando sus familiares y amigos.
¿Qué ocurrió con Óscar García Lema? Fuentes de la Guardia Civil creen que si se desorientó y sufrió un accidente ya lo habrían encontrado en el área que ha sido revisada. Si hubiera sido retenido, consideran que sus captores habrían contactado con la familia para pedir un rescate. Aunque todo puede ser. ¿Se fue de manera voluntaria? Es otra de las hipótesis que siguen sobre la mesa, pero ninguna está descartada al 100 %. El estudio del teléfono puede ser clave. También las cámaras de seguridad de autopistas y gasolineras, otra de las vertientes de la investigación de la Policía Judicial. Imposible es que se marchara en avión: su pasaporte también estaba en su casa.
El perfil
Óscar García mide 1,82 metros y tiene complexión atlética, ya que practica deporte de forma habitual. Tiene 62 años, el pelo canoso, cejas pobladas y no padece ninguna enfermedad que permita pensar en que se desorientara.