Luís Tosar y Blanca Portillo recrean en «La ley del mar» un rescate de inmigrantes

Los actores Luís Tosar y Blanca Portillo ruedan en el puerto de Alicante la recreación del desembarco en el 2006 en el puerto de la Valeta (Malta) de los 51 inmigrantes subsaharianos rescatados frente a Libia por un pesquero de Santa Pola, en una serie producida por RTVE y Á Punt con el título La ley del mar.

Dirigida por Alberto Ruiz Rojo y de tres capítulos, la serie recuerda la odisea del pesquero Francisco y Catalina y se filma durante dos meses en escenarios naturales entre Madrid, Alicante, los platós de la Ciudad de la Luz y Santa Pola, incluyendo un rodaje en alta mar.

Para recrear el desembarco de los rescatados un 21 de julio del 2006 en el puerto de La Valeta, en los muelles de Poniente del puerto de Alicante, cerca de la lonja y del varadero, se ha instalado una gran carpa de Cruz Roja y se cuenta con la colaboración de numerosos figurantes para hacer el papel de voluntarios y agentes de las fuerzas de seguridad.

Tosar  se mete en el papel de patrón del pesquero (José Durá) y Blanca Portillo, que hace de embajadora española en Malta. En la escenas ya grabadas, el primero despedía emocionado a los inmigrantes en el momento de bajar del pesquero mientras que Blanca Portillo recibía y saludaba a los recién llegados al pisar tierra firme en los muelles alicantinos, por un día «reconvertidos» en malteses.

El rodaje ha continuado con el momento en el que los inmigrantes son atendidos por personal de Cruz Roja y cuando suben al autobús antes de ser dirigidos a sus lugares de destino.

Entre el 14 y 21 de julio del 2006, la actuación humanitaria del pesquero Francisco y Catalina, con José Durá de patrón y nueve tripulantes más, conmocionaron a la sociedad española y europea ya que compartieron el barco con 51 inmigrantes eritreos, entre ellos una niña de dos años y una embarazada, varados a diez millas de Malta.

Mientras que la UE resolvía qué hacer porque las autoridades maltesas se negaban en un primer momento a la acogida, los tripulantes y los rescatados vivieron momentos de gran incertidumbre hasta que, por fin, el 21 de julio los inmigrantes pudieron por fin pisar tierra y ser repartidos entre tres países, la mayoría de ellos en España.

Con un presupuesto de 3,8 millones de euros, la filmación arrancó el pasado 15 de mayo en Santa Pola y la productora estima que el gasto local ascienda a unos 2,3 millones de euros durante dos meses. Una parte del rodaje tendrá lugar en los platós de Ciudad de la Luz de Alicante y se convertirá en una de las primeras filmaciones en ese lugar una vez cumplida la sanción de once años impuesta por Bruselas por ayudas públicas ilegales en la construcción.

Blanca Portillo explicó que da vida a la entonces embajadora en Malta Andrea de Velasco, la persona que «se encargó del trabajo de despachos, político y de relaciones públicas para conseguir que el Francisco y Catalina llegara a buen puerto». Ella operó en «el mundo paralelo a lo que sucede en el barco» y que «no tiene nada que ver con el lado humano de esa gente que huye del horror para llegar a nuestras costas» dentro de un problema que los países occidentales «vamos pasando de unos a otros sin tener en cuenta que lo que hay ahí dentro de las pateras son seres humanos».

Portillo confía en que esta serie televisiva basada en una historia real ayude al espectador a «reflexionar de otra manera» ante el fenómeno de la migración a partir de que ayudar a que «se ponga en el lugar de esas personas y que (éstas) no sean solo un número o una cifra en el titular de un Telediario». «Cuando el cine o la televisión cuenta historias reales, puedes dar una dimensión más y acercarte a los corazones de los personajes, que es algo que no hacemos cuando vemos una noticia en la televisión».

Por su parte, el actor Alfonso Lara encarna al cocinero del pesquero, un personaje que es «un poco la madre de todos ya que cuida primero a la tripulación y luego a los que vienen» procedentes de la patera.