La Voz de Galicia

«Hay una secta para cada uno de nosotros», aseguran los directores de la serie sobre Patricia Aguilar

Plata o plomo

La voz Redacción / Agencias

Disney+ estrena «548 días: captada por una secta», basada en la historia real de una joven que fue rescatada por su familia en Perú

30 Jun 2023. Actualizado a las 09:37 h.

En enero de 2017, con 18 años recién cumplidos, Patricia Aguilar se escapó de casa rumbo a Perú tras haber sido contactada varios meses antes por Félix Steven Manrique, un falso mesías que aseguraba ser un enviado de Dios para repoblar la Tierra tras el Apocalipsis. La joven ilicitana fue rescatada en julio del 2018 por la policía peruana en colaboración con la familia Aguilar. Ahora, los directores Olmo Figueredo y José Ortuño retratan ese caso en la serie documental 548 días: Captada por una secta, que se estrena el 30 de junio en Disney+.

«Existe una secta para cada uno de nosotros», asegura Ortuño en una entrevista concedida a Europa Press en la que ambos cineastas reflexionan sobre los peligros de las sectas y la facilidad de caer en ellas.

«Todos podemos caer en una secta en cualquier momento de nuestra vida porque existe un captador y una secta amoldada cada uno. Si una persona es religiosa o es muy espiritual lo pueden captar por ahí, pero hay muchísimos otros temas con los que también te pueden captar, sobre todo aprovechando momentos de vulnerabilidad. Todos podemos pasar por una pérdida de trabajo, por una muerte de un familiar cercano... En ese momento nos volvemos vulnerables y susceptibles de ser captados por estas personas que están ahí a la caza de nuevas víctimas», añade Ortuño.

Por su parte, Figueredo expone el perfil de esos captadores que ejercen de líderes en las sectas. «Son gente sumamente inteligente, con unas dotes comunicativas espectaculares. Son personas absolutamente narcisistas, con perfiles en muchos casos psicopáticos. Disfrutan con el poder y con la capacidad de controlar a terceros, ya sea ejerciendo un control sexual, laboral, personal... Disfrutan de ello y el problema es que si de lo que conocen mucho es de deporte, te pueden pillar por tu interés en el deporte, o por interés en las criptomonedas... Hay mil maneras de captarte», explica el director.

«Algo muy importante que se repite constantemente y que en este caso era muy evidente, es la separación de los tuyos. El hacerte creer que ellos no te entienden, no te comprenden, son los malos, el enemigo. Eso es algo que se repite y que hace que esa persona vea todo su entorno como hostil, que la única persona que va a ayudarle de esa hostilidad es ese refugio que crea el propio el propio captador», indica Figueredo. Además, el cineasta indica la que considera que es la clave para evitarlo.

«En la familia tiene que haber una comunicación fluida. Es muy importante pedir ayuda. Hay algo que está claro y es que una captación no se produce porque sí, se produce porque hay un momento de debilidad, de vulnerabilidad», incide, exponiendo la importancia en la comunicación y en el cuidado de la salud mental. «En el momento en el que la información viene determinada solo por una línea, hemos perdido nuestra libertad. Ya estamos absolutamente bajo el control y la influencia de una persona. Y si esa persona tiene intenciones negativas lo vamos a pasar mal», sentencia.

A este respecto, Figueredo también asegura que, en su opinión, quienes se dejan embaucar por las sectas son personas sensatas. «548 días: Captada por una secta es una historia para liberarnos de prejuicios. Primero para darnos cuenta de que la gente que cae en sectas no es gilipollas, son ultrainteligentes. Las sectas no quieren gente tonta, quieren gente inteligente que sea valiosa, que puedan o bien captar a más gente o bien proveerles de algo, ser útiles», considera el director.

Testimonio en primera persona

La serie documental, de tres episodios de una hora, está narrada por la propia Patricia Aguilar, su familia, la policía peruana que la rescató y por otras mujeres captadas por Manrique. «Ellos sabían desde el primer momento que querían contar su historia. Por un motivo claro, querían contarla para ver si podían ayudar a alguien a que no cometiesen sus mismos errores. Por eso me gusta que hayan hablado todos, pero lo que de verdad me gusta es que hayan sido tan generosos y se hayan dado tanta caña», sugiere el propio Figueredo.

«Han sido muy autocríticos, cada uno ha asumido su parte de culpa porque obviamente en esta historia hay un elemento grande de vulnerabilidad, pero también hay un fallo de comunicación familiar. La comunicación es importante. Y todo esto creemos que cuando se estrene en Disney+, si padres lo ven con hijos adolescentes cuando la comunicación familiar empieza a tambalearse en ese momento tan complicado de la adolescencia, puede ayudarles tanto a unos como a otros», sentencia el director sobre el objetivo que compartían creadores y protagonistas de la serie.

«También es muy interesante la evolución que ha tenido la propia Patricia. Cuando vuelve de Perú tras pasar por todo lo que pasó, era muy poco receptiva a conceder entrevistas, no quería ver una cámara ni en pintura. Incluso al principio, cuando finalmente accedió a hacer el documental, había una serie de líneas rojas, cosas de las que prefería no hablar. Pero a medida que fuimos desarrollando las entrevistas y fuimos grabando con ella, cada vez estaba más dispuesta a hablar de cualquier tema», agradece Ortuño. 548 días: Captada por una secta se estrena en Disney+ el 30 de junio.


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