El WorldPride pide que la libertad sexual sea reconocida en todo el mundo
Sociedad
Madrid se ha blindado para la fiesta del orgullo gay ante los recientes atentados que han ocurrido en otras ciudades
28 Jun 2017. Actualizado a las 23:00 h.
El WorldPride de Madrid no se ha olvidado este jueves de su carácter internacional y ha pedido la libertad sexual en los países donde todavía existe represión al colectivo LGTBI, porque si algo caracteriza al Orgullo de Madrid es que convierte la fiesta en una reivindicación y la reivindicación en fiesta. Desde la Plaza de Pedro Zerolo, la más grande del barrio de Chueca, los responsables de calentar motores han sido Cabaré Briefs, como antesala al esperado pregón de este año, que ha dado comienzo a una celebración que espera acoger en la capital entre dos y tres millones de personas, ya que la capital de España celebrará por primera vez el EuroPride y el WorldPride simultáneamente, un hecho histórico en el mundo.
Después de la ola de calor que ha asolado la ciudad, el tiempo ha dado un respiro al Orgullo, aunque no han faltado las cervezas, las banderas arcoiris a modo de capa y algún que otro disfraz de cuero que dejaba poco a la imaginación.
Madrid se tiñe de los colores del arco iris para celebrar el Orgullo gay
Ante la serie de atentados que han sucedido en diferentes ciudades europeas, Madrid se ha preparado para minimizar cualquier riesgo. Desde la Puerta del Sol, donde también hay un escenario WolrdPride, hasta Chueca, agentes de policía han registrado las mochilas de los viandantes y controlando las entradas de acceso, mientras se podía escuchar algún: «me estoy poniendo un poco nerviosa». Sin embargo, la fiesta ha transcurrido sin incidentes en la Plaza de Pedro Zerolo, mantenido el tono lúdico de esta reivindicación que, además de su carácter internacional y europeo, coincide con los 40 años de la primera manifestación por los derechos de los homosexuales celebrada en 1977 en el país y los 25 de la fundación de la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (FELGTB).
Viva la vida es el lema elegido para definir la cita junto, de carácter no oficial, «viva el amor» pero, sin duda, el himno de hoy ha sido la conocida canción de Alaska «A quién le importa», que ha sido reversionada para la ocasión con un carácter más 'tecno'. Esta vez el pregón se ha dado de una forma muy diferente a otras veces, con rostros que han participado años atrás para volver a reivindicar una vez más los derechos LGTBI. Alejando Amenábar, Ana Belén, Cayetana Guillén Cuervo, Boris Izaguirre o Pepón Nieto han sido algunos de los representantes de este elenco coral.
Dar una mayor visualización, una ley de igualdad LGTBI que sea aprobada por todos los grupos parlamentarios en el Congreso de los Diputados porque «los transexuales no estamos locos», la protección de las familias, una educación inclusiva y la libertad de amar, han sido los mensajes de este año. «Igualdad, igualdad, igualdad», fue la palabra más coreada por centenares de personas que alzaban sus banderas y móviles para registrar este momento internacional
Pero sin duda la mayor petición ha sido la libertad sexual en todo el mundo, ante la opresión que existe en 75 países donde aún condenan con prisión la homosexualidad, como Rusia o Chechenia. El televisivo Boris Izaguirre también ha hecho un guiño a Venezuela y ha pedido una «Venezuela libre y en fiesta».
Alaska ha recibido un premio para reconocer su trayectoria por la lucha LGTBI y ha recordado los inicios del Orgullo en Madrid, donde acudían «no más de 500 personas», pero, ha dicho, gracias a la «evolución de pensamiento», se ha convertido en lucha festiva reconocida mundialmente. El punto álgido de esta celebración se completará el sábado con la manifestación del Orgullo, para continuar en la lucha por la igualdad, no sólo en España sino en todo el mundo.