Asturias, Aragón y el País Vasco se suman al cierre de Navarra y La Rioja
Sociedad
Cataluña sopesa el confinamiento domiciliario durante los fines de semana
27 Oct 2020. Actualizado a las 09:00 h.
Con el estado de alarma a su disposición, algunas comunidades han comenzado ya a curarse literalmente en salud ante el inminente puente de Todos los Santos. A Navarra y a La Rioja, cerradas perimetralmente desde la semana pasada, se sumaron ayer Aragón, Asturias y el País Vasco, que además ha restringido los movimientos de sus ciudadanos entre municipios.
Aparte de esas cinco comunidades autónomas, Madrid estudiará a lo largo de esta semana si decreta el confinamiento perimetral de la región para evitar desplazamientos durante el puente, al igual que Castilla y León que, en boca de su consejera de Sanidad, Verónica Casado, no descarta cerrar el territorio. Por su parte, la Generalitat de Cataluña está contemplando decretar un confinamiento los fines de semana para limitar las actividades sociales. Se trata de «un escenario que está sobre la mesa porque el fin de semana es cuando más interacciones sociales se producen», según explicó la consejera de Presidencia, Meritxell Budó.
Es «la última carta» que hay en la mano para tratar de controlar la pandemia antes de ir a un nuevo confinamiento en las casas «que es lo que se está tratando de evitar», asegura el presidente asturiano, Adrián Barbón, que reconoce que son «medidas drásticas» a aplicar ya desde las 00.00 horas de hoy.
Más rápido incluso ha sido el cierre perimetral de la comunidad de Aragón, en vigor desde la medianoche de ayer hasta el 9 de noviembre. Además se mantendrá el confinamiento de las tres capitales de provincia respecto del resto del territorio aragonés, así como el horario del toque de queda marcado como referencia por el Gobierno central, de 23.00 a 06.00 horas.
«Ojalá lo antes posible haya una situación epidemiológica lo suficientemente favorable como para ser más laxos», señaló el presidente regional, Javier Lambán, para quien en estos momentos «sería una insensatez» renunciar a las medidas restrictivas ya impuestas a nivel autonómico y que, a su juicio, complementan a las del estado de alarma.
Es preciso «utilizar todas las herramientas» para revertir la «preocupante» situación epidemiológica, que afecta al conjunto de la comunidad autónoma, apuntó la consejera vasca de Salud, Gotzone Sagardui, quien anunció ayer que van a publicar de inmediato las nuevas restricciones con la intención de que hayan entrado en vigor a las 6.00 horas de hoy.
Las medidas son, por tanto, comunes a todo el territorio con independencia de la afección concreta del virus en cada zona. Es más, se incluye el cierre de los municipios vascos entre sí, aunque en el caso de los colindantes se permitirá la movilidad «de tránsito habitual para la realización de actividades socioeconómicas». También quedan limitadas a seis personas las reuniones de personas no convivientes, ya sea en espacios públicos o privados.
En la mayoría de comunidades aún no ha habido pronunciamientos claros respecto a adoptar medidas de este tipo. En Castilla y León la consejera de Sanidad, Verónica Casado, no descarta la limitación de movilidad pero el presidente, Alfonso Fernández Mañueco, se ha limitado a establecer el toque de queda de 22.00 a 06.00 horas y no habla aún de otras restricciones.
Su homólogo castellano-manchego, Emiliano García-Page, sí ha confirmado que por el momento no habrá limitaciones añadidas al toque de queda. También las descartan expresamente en Cantabria y Extremadura. En esta última comunidad incluso se va a revisar la lista de localidades con cierre perimetral para ver si con el toque de queda nocturno sería suficiente.
El presidente murciano, Fernando López Miras, tampoco ve con malos ojos una medida de este tipo si sirve para «evitar el cierre total, como ha ocurrido en otras comunidades».
En Madrid empezó ayer el confinamiento de 32 zonas básicas de salud correspondientes a 12 municipios, aunque el consejero de Justicia, Enrique López, dice que están a la espera de lo que determinen los expertos en salud pública para decidir si los madrileños podrán viajar en el próximo puente de Todos los Santos.
En La Rioja el Tribunal Superior de Justicia (TSJR) confirmó ayer el cierre decretado por el Gobierno autonómico «para preservar la vida y la salud de los ciudadanos» que está en vigor desde el 23 de octubre y se extenderá hasta el 7 de noviembre, mientras que el de Navarra, también validado por la justicia, va desde el pasado día 22 hasta el próximo día 4.