Una especie de alga invasora amenaza el turismo y la pesca en el Algarve
Sociedad
En la playa do Carboeiro alcanzó las 1,20 metros de altura; la especie procede de Japón y Corea
28 Jun 2023. Actualizado a las 16:46 h.
Hasta 1,20 metros de altura alcanzó en la playa do Carboeiro, en el Algarve, la acumulación de Rugulopteryx okamurae. Se trata de una especie invasora de alga castaña, procedente de Japón y Corea, y que provoca la máxima preocupación en el Algarve por los efectos que su inmensa acumulación pueda tener sobre el turismo.
Según declaró a la agencia Lusa la vicealcaldesa de la Cámara de Lagoa, Anabela Rocha, «siempre hay peligro de acumulación» cuando sopla viento de sureste, pero estos días está alcanzando niveles excepcionales, con arenales de hasta 90 metros prácticamente bloqueados.
Lagoa es la localidad más afectada y el Ayuntamiento ya invirtió 40.000 euros en extraer hasta 400 toneladas de la especie invasora, según recoge el canal público RTP. El coste preocupa y, por eso, se empiezan a testar proyectos piloto para reducir el impacto en futuras ocasiones, así como se solicita la ayuda del Gobierno mediante la inyección de fondos estatales. Además, se estudia cómo acotar las zonas de acumulación y posibles formas de reutilización para extraer beneficio económico.
Es también preocupante la frecuencia, ya que el fenómeno se registró en el 2021 y el 2022, aunque en esa ocasión fue el alga roja invasora Asparagopsis armata, procedente de aguas de Australia y Nueva Zelanda, la que se acumuló entre las playas de Albufeira y Faro. También el alga verde de género ulva causó un fuerte impacto en el este de la región.
De ahí que el Centro de Ciencias do Mar de la Universidad del Algarve haya creado una plataforma para recoger datos sobre las especies de algas invasoras y definir cuáles son las que conllevan más riesgo de acumulaciones. Un experto del centro, Rui Santos, expresó que «esta alga está ahora más desarrollada ahora por las condiciones más favorables, pero está presente durante todo el año», según recoge la agencia Lusa.
El fenómeno impacta directamente en dos de las mayores fuentes de ingresos de la región, el turismo y la pesca, siendo especialmente dañina para el pulpo, que se ve obligado a abandonar su hábitat. Con todo, no constituye un peligro para la salud humana y su erradicación es casi imposible.
Además, se cree que, en los próximos días, el alga seguirá avanzando hacia el norte por toda la costa lusa y ya se demanda una respuesta a nivel nacional para que las labores de pesca no se vean afectadas. También en España y Francia se han registrado lugares puntuales con este problema a lo largo de los últimos años.