Los psicólogos denuncian esperas de un año para conseguir una cita en el Sergas
Sociedad
Se quejan de que el número de profesionales no llega siquiera a la mitad de los recomendados y en algunas áreas hay que esperar nueve meses entre consulta y consulta
10 Oct 2023. Actualizado a las 16:50 h.
Coincidiendo con el Día Mundial de la Salud Mental, que se celebra hoy, el Colexio Oficial de Psicoloxía de Galicia (COPG), ha publicado un extenso comunicado en el que expone sus propios datos sobre la atención clínica dentro de la sanidad pública en Galicia.
El COPG, que representa a 3.600 profesionales, denuncia que en el Sergas dedicados a la atención de pacientes hay 141, con 12, por ejemplo, para toda el área sanitaria de Pontevedra. La ratio apenas supera los cinco especialistas por cada 100.000 habitantes frente a los doce recomendados. La consecuencia directa son esperas de hasta un año por una primera cita en Santiago, Lugo o Pontevedra y de hasta nueve meses entre consulta y consulta en Vigo. Tiempos incompatibles con cualquier tratamiento como denuncia el colegio que incide en que «a psicoloxía non está para anestesiar o sufrimento das persoas e adaptalas a unhas condicións vitais inadecuadas; esas eivas estruturais deben ser atendidas desde a Administración pública e a propia comunidade».
Tiempos de espera «inasumibles»
«En Galicia non se cumpre o dereito humano de atender á saúde mental». Es la rotunda afirmación del Colexio Oficial de Psicoloxía de Galicia (COPG), que señala la dificultad en el acceso al sistema público y la falta de equidad en el reparto de recursos entre áreas sanitarias como los principales defectos en la atención a la salud mental en la comunidad.
Aunque reconocen que en los tres últimos años se ha producido una «importante incorporación» de profesionales de la psicología al Sergas, gracias al Plan de Saúde Mental aprobado por la Xunta en el 2020, estiman que esa «inxección de recursos» no ha sido suficiente, debido a la escasez que se arrastraba. Así las cosas, apuntan que la media gallega es de apenas cinco psicólogos clínicos por cada 100.000 habitantes (en Pontevedra no llegaría ni a cuatro), muy lejos del mínimo exigible, que sería de doce.
Esa «infradotación de persoal», apuntan, se traduce en unos tiempos de espera «inasumibles», tanto para la primera consulta como en lo que toca a la frecuencia de las visitas. «En certos dispositivos chégase a un ano de tempo de espera para a primeira consulta en poboación adulta, e o período entre consultas é excesivo, sendo o máis habitual entre 3 e 5 meses, polo que o máis habitual é que moitos e moitas pacientes non poidan ser atendidos nin sequera tres veces nun ano». Una frecuencia que, indican, hace muy difícil realizar un tratamiento psicológico eficaz, lo que favorece la cronificación y el agravamiento de los trastornos mentales.
Los datos varían mucho entre las distintas áreas sanitarias, pero llegan a extremos como los hasta doce meses de espera para una primera consulta de adulto en el área de Santiago o los 6 para población infanto-juvenil en la de Vigo, así como los nueve meses entre citas que pueden registrar los adultos o los hasta 11 meses para niños y jóvenes en el área viguesa.
Listas de espera en centros públicos y privados
Esa dificultad en el acceso a la atención en el sistema público, junto con las listas de espera que, aseguran, «xa se están producindo nas axendas dos gabinetes privados, tanto de psicoloxía clínica como sanitaria», revelan para el COPG que el «nivel de deterioro na saúde mental da poboación galega está medrando». Aluden, entre otros factores, a la «elevada presión» ejercida sobre las personas por cuestiones como la subida sostenida de costes de la vida o las consecuencias psicológicas y sobre la salud de la pandemia de covid.
Ante esto, el Colegio apunta que no garantizar el derecho a la atención psicológica «supón un sufrimento engadido para os/as pacientes, as súas familias e para o propio sistema social, ademais do mencionado risco de empeoramento e cronificación pola tardanza á hora de recibir a atención psicolóxica». Y resalta la urgencia de mejorar la situación apuntando que Galicia es la comunidad que encabeza el consumo de psicofármacos en España: casi un tercio de los gallegos los toman a diario.
Modelo más cercano
Abogan, también, por un cambio de modelo, al entender que el actual «non é útil»: «Como colexio profesional que representa a máis de 3.600 psicólogos e psicólogas en Galicia, demandamos unha reflexión profunda e seria sobre o modelo, con cuestións urxentes, como a mellora da accesibilidade, a aposta real pola prevención, a oferta dunha resposta rápida, ampliar a asistencia con intervencións grupais, etcétera».
En ese sentido, apuestan por ofrecer el cuidado a la salud mental desde los ámbitos más cercanos a la ciudadanía, apuntando que la incorporación de la psicología a la Atención Primaria está dando resultados «moi positivos» —«É urxente que se garanta este dereito con independencia do concello no que se viva», añaden—. También reclaman la incorporación de la psicología en todos los centros educativos, como el mejor modo de prevenir trastornos de salud mental en la infancia y la adolescencia, recordando que más de 20.000 menores de quince años toman psicofármacos para la ansiedad o la depresión en Galicia.