Unicef, ante la situación de los niños: «Hay muy poco que celebrar, pero no damos un paso atrás por la infancia»
Sociedad
En la semana que se celebra la Convención de los Derechos del Niño, Suárez Pertierra, director de la oenegé en España, llama a seguir trabajando a pesar del complicado contexto
25 Nov 2023. Actualizado a las 05:00 h.
Ya hace más de treinta años que, el 20 de noviembre de 1989, se firmó la Convención sobre los Derechos del Niño. Esa fecha se ha elegido para celebrar el día Mundial de la Infancia, una efeméride que, a juicio de Gustavo Suárez Pertierra, presidente de Unicef España, no tiene mucho que celebrar. «Estamos inmersos en un contexto de policrisis —conflictos, crisis económica, cambio climático, impacto de la tecnología, violencia...— que hace que, en este Día Mundial de la Infancia, tengamos muy poco que celebrar», asegura. «Las imágenes de Gaza que vemos cada día en los medios nos sobrecogen y nos recuerdan que infancia no es sinónimo de felicidad. Pero, aunque la actualidad sea desesperanzadora, desde UNICEF no damos un paso atrás. En este día reforzamos nuestro compromiso con los niños y niñas más vulnerables y reiteramos con firmeza que seguiremos trabajando para lograr que se cumplan los derechos de cada niño, niña y adolescente, esté donde esté», añade.
Ese trabajo también se desempeña sin descanso en España, que ahora mismo está a la cola de la Unión Europea (UE) en cifras de pobreza infantil, con el 32,2 % de los niños y niñas en riesgo de sufrirla. En Galicia el riesgo de pobreza infantil es del 24,9 %
Preocupa también la salud mental, especialmente desde la pandemia del COVID-19, ya que el 15% de los adolescentes presenta síntomas graves o moderadamente graves de depresión, y el número de suicidios de jóvenes ha aumentado desde 2020. En Galicia el 15,8% presenta síntomas de Depresión Grave o Moderadamente Grave.
Es importante también reforzar el sistema de protección a la infancia en nuestro país, tanto para prevenir y abordar la violencia —entre pares y contra la infancia— en todos los ámbitos de la vida de un niño; como para mejorar la atención a los niños y niñas más vulnerables, por ejemplo, la infancia migrante que llega a Canarias, cuyo sistema de protección acoge ya a más de 4.700 menores de edad no acompañados.
«No dejaremos que ningún niño, niña ni adolescente se quede atrás»
En una sociedad en la que la tecnología ocupa un lugar tan destacado, UNICEF considera que es vital garantizar la protección a la infancia también en el ámbito digital, para mejorar datos tan preocupantes como que un 42 % de los niños, niñas y adolescentes en la ESO ha recibido mensajes erótico-sexuales por parte de un adulto a través de redes, chats o videojuegos. Un 38 % en Galicia.
«Sin duda, nos enfrentamos a retos importantes para la infancia en el mundo y en nuestro país, pero no dejaremos que ningún niño, niña ni adolescente quede atrás. Para Unicef cada día la infancia está en el centro de cada una de nuestras acciones», afirma Gustavo Suárez Pertierra. Pertierra recordó que «la confluencia del conflicto armado en Ucrania y la subsiguiente crisis económica mundial por el aumento del precio de los combustibles y los alimentos, las consecuencias del cambio climático y los efectos aún perceptibles de la pandemia del covid, hicieron de 2022 uno de los años más difíciles para la infancia desde la Segunda Guerra Mundial».
El trabajo de Unicef se hace posible gracias al apoyo de más de 544.000 socios y donantes, más de 520 empresas, fundaciones y entidades deportivas; más de 100 instituciones y administraciones públicas, 342 ciudades amigas de la infancia, 331 embajadores y más de 1,1 millones de seguidores en redes sociales.
Los niños gallegos reclaman: «Necesitamos más profesionales en el ámbito de la salud mental»
Un total de 50 niños, niñas y adolescentes de entre 10 y 17 años, integrantes de 12 consejos locales de participación de Galicia, se reunieron en O Carballiño en el III Encuentro Gallego de Consejos Locales de Participación Infantil y Adolescente, promovido por Unicef Comité Galicia.
Niñas, niños y adolescentes de A Laracha, A Coruña, Burela, Castrelo de Miño, Nigrán, Moaña, Moeche, Ponteareas, Redondela, Teo, Tomiño y Viveiro han reflexionado sobre el derecho a la protección, la prevención de la violencia y el papel municipal y del gobierno autonómico como entornos protectores para proteger los derechos de la infancia.
En el ámbito de protección desde el entorno familiar, consideran que se dan diversos aspectos que fomentan situaciones de desprotección e inseguridad. Así, hacen referencia a falta de cariño, cuidado y atención, incomprensión, y una elevada falta de supervisión parental en relación a las redes sociales. «Pedimos más comunicación entre los miembros de la familia, respeto a nuestras opiniones, confianza y abrazos llenos de amor», aseguraba Ana, de 10 años, de Castrelo de Miño. Desde el ámbito educativo, los niños y niñas solicitan formación obligatoria y continuada en protección para el profesorado, así como formación para educadores, padres y madres sobre las consecuencias del mal uso de las tecnologías y las redes sociales.
También están preocupados por un tema que les afecta cada vez más: la salud mental. «Necesitamos más profesionales en el ámbito de la salud mental, y no tener que esperar tanto tiempo para que nos den una cita», afirmaba Emily, de 15 años, de Viveiro.
Además, para prevenir y poder dar respuesta a las agresiones físicas y psicológicas, reclaman poder contar con personal especializado en salud mental en los centros educativos. Lea, de 13 años, de Teo, explica que «moitísimos nenos, nenas e adolescentes síntense moi mal consigo mesmos, por comentarios que facemos, por como nos tratan,… Nós queremos cambiar iso e parécenos moi importante que se coide desde todos os ámbitos a nosa saúde mental».
Todo el trabajo realizado durante en estos días quedó recogido en el Manifiesto de Carballiño, cuyas principales ideas, propuestas y compromisos han sido presentados en la sesión de clausura del encuentro.