Francia ensayará el uniforme obligatorio en la escuela para fomentar «orden, valores y respeto»
Sociedad
El experimento durará dos años en colegios y localidades voluntarias. El ministerio cree que mejorará el rendimiento y reducirá el acoso.
12 Dec 2023. Actualizado a las 05:00 h.
El ministerio francés de Educación va a lanzar un experimento a gran escala sobre el uso obligatorio del uniforme escolar en los colegios e institutos públicos galos antes de decidir si lo generaliza a nivel nacional. La medida tiene un triple objetivo: luchar contra la desigualdad social y el acoso escolar en los centros de enseñanza y fomentar la laicidad.
El experimento comenzará en septiembre de 2024 en aquellas localidades que se hayan ofrecido voluntarias, aunque en los centros más motivados podrían arrancar ya esta misma primavera. El número de colegios que participarán será, en una primera fase, limitado, ya que la medida estará en parte financiada por el Estado. Tourcoing, Niza, Reims y Perpiñán serán las primeras localidades en probar el uniforme obligatorio en Francia.
Los alumnos de las escuelas e institutos que participen en esta iniciativa recibirán cinco polos, dos jerséis y dos pantalones al inicio del curso escolar, aunque algunas localidades podrán decidir, si así lo desea, utilizar solo una parte del uniforme, por ejemplo, el polo y el jersey, pero no el pantalón. Algunas escuelas o institutos podrían también optar por llevar un escudo en el uniforme si así lo desean.
El kit completo costará unos 200 euros, pero las familias no tendrán inicialmente que pagar nada, ya que se espera que el estado pague una mitad y la otra corra a cargo del ayuntamiento, el departamento o la región voluntaria, reveló la cadena France Info antes del anuncio oficial del ministerio de Educación.
«El uso del uniforme en la escuela es una piedra en el edificio quizá, para una vuelta a los valores, al orden y al respeto en los centros escolares», deseó Arnaud Robinet, alcalde de Reims, localidad que comenzará en septiembre a aplicar esta medida. Robinet considera que sería bueno experimentar el uniforme tanto en los colegios del centro de la ciudad como en los barrios conflictivos de la periferia. «El uniforme puede permitir anular las diferencias sociales y a veces las comunitarias y desarrollar el sentimiento de pertenencia a un equipo», explicó Robinet en declaraciones a FranceInfo.
La derecha y la extrema derecha en Francia reclaman desde hace tiempo el uniforme obligatorio en los colegios e institutos públicos, pero la izquierda se opone a ello. El pasado enero, Agrupación Nacional, el partido de la ultraderechista Marine Le Pen, presentó una proposición de ley para imponerlo, que fue rechazada por la Asamblea Nacional. Le Pen consideró entonces que el uniforme obligatorio arreglaría dos problemas: «La competición de marcas y la presión de los islamistas sobre los niños que van al colegio».
La primera dama creó entonces polémica al apoyar públicamente la propuesta de la extrema derecha. Brigitte Macron se mostró a favor del uniforme obligatorio «siempre que sea sobrio, pero no tristón», dijo. Siete de cada diez franceses (68 %) están a favor del uniforme obligatorio, mientras que el 27 % se opone, según un sondeo publicado en octubre.
Prohibición de la abaya
El gobierno francés prohibió formalmente el pasado septiembre a las alumnas llevar en las escuelas públicas la abaya, la túnica larga y holgada utilizada por muchas mujeres musulmanas para cubrir totalmente su cuerpo y sus brazos. El ministerio de Educación tomó esta decisión en nombre del principio de laicidad y para poner fin a las controversias en torno al aumento significativo en los últimos años del uso de esta vestimenta tradicional en las escuelas e institutos públicos franceses por parte de adolescentes musulmanas.
Hay que tener en cuenta que Francia es un Estado laico. La ley de 1905 establece una clara separación entre las Iglesias y el Estado. Y una ley de 2004 prohíbe en los colegios y los institutos públicos «el uso de símbolos o atuendos a través de los cuales los alumnos manifiesten ostensiblemente unas creencias religiosas». Está prohibido, por ejemplo, que los alumnos lleven velo islámico, kipá judía, turbante sij o un crucifijo cristiano grande. Los alumnos deben quitarse estos símbolos religiosos ostentosos antes de entrar en clase. En cambio, los símbolos religiosos discretos sí están permitidos. Esta ley no afecta a las escuelas privadas, donde los alumnos pueden llevar símbolos sin problema.