Un anticiclón inquieto aboca a Galicia a una meteorología cambiante

En la Tierra existen dos tipos de anticiclón: térmicos y termodinámicos. Los primeros se desarrollan en zonas frías como Groenlandia, Siberia y la Antártida. Un aire muy gélido provoca un columna atmosférica muy pesada que termina provocando un sistema de altas presiones. Además, están los termodinámicos como los que hay en las costas de Sudamérica, California, Sudáfrica y el más conocido para nosotros, el de Azores.

El anticiclón que lleva el nombre del archipiélago portugués es también de tipo semipermanente. Esto quiere decir que en función de la época está más al norte o al sur. En definitiva, siempre está en movimiento, sobre todo en las estaciones de transición como la primavera y el otoño, cuando coinciden aire cálido que viene y frío que se va o al revés.

Esta nota teórica ayuda a contextualizar el pronóstico del tiempo a corto plazo. Galicia afronta un período con un tiempo muy cambiante ya que el anticiclón va a comportarse de manera muy dinámica. Y aunque en algunos momentos pueda llover, hay que quedarse con la buena noticia de que el anticiclón se encuentre más cerca de lo que ha estado durante las últimas semanas.

Hoy, por ejemplo, Galicia caerá del lado de las bajas presiones, con el paso de un frente por la tarde. Así, a partir del mediodía llegarán las lluvias que serán más persistentes en la franja atlántica y menos probables en el este de la provincia de Ourense. El viento de componente sur mantendrá las máximas en torno a los 20 grados.

Mañana, la comunidad recupera la influencia anticiclónica, pero sin perder del todo el efecto de las borrascas. Un frente poco activo dejará lluvias al noroeste por la mañana y por la tarde serán muy ocasionales. Los valores diurnos seguirán siendo altas.

El lunes aumentará la inestabilidad atmosférica con la entrada de aire frío en las capas altas de la atmósfera que favorecerá el desarrollo vertical de las nubes por lo que se formarán chubascos tormentosos, más probables en el interior. Las temperaturas sufrirán un ligero descenso.

El martes, el anticiclón retrocede y un frente aprovechará para dejar más precipitaciones. A partir del miércoles vuelve a avanzar y Galicia recuperará cierta estabilidad que aguantará el resto de la semana. Una buena tendencia de cara a la Semana Santa que habrá que ir confirmando pronóstico a pronóstico.