Descubierta una nueva especie de dinosaurio con cuernos gigantes
Sociedad
Este coloso, denominado «Lokiceratops rangiformis», medía unos 6,7 metros de largo y pesaba cerca de 5 toneladas. Pertenece a los ceratópsidos, un grupo que evolucionó hace unos 92 millones de años, y es una de las especies con cornamenta más grande y ornamentada jamás encontrada
20 Jun 2024. Actualizado a las 18:58 h.
Una nueva especie de dinosaurio herbívoro con cuernos gigantes, bautizada como lokiceratops rangiformis, fue descubierta en una excavación en una zona pantanosa del estado de Montana (EE.UU.), a solo unos kilómetros de la frontera con Canadá, según se anunció este jueves la revista científica PeerJ. Este nuevo dinosaurio «luce los cuernos con volantes más grandes jamás vistos en un ceratopsio (infraorden de dinosaurios)», explicó Joseph Sertich, paleontólogo del Instituto Smithsonian y de la Universidad Estatal de Colorado, y codirector de la investigación.
Hace más de 78 millones de años, los lokiceratops habitaban los pantanos y llanuras a lo largo de la costa oriental de Laramidia, ahora la parte occidental de América del Norte. Estos dinosaurios de cuatro patas tenían una boca llena de más de 200 dientes afilados para cortar la vegetación, medían aproximadamente 6,7 metros de largo y pesaban unas cinco toneladas.
Las características únicas de lokiceratops rangiformis, según los expertos, son la ausencia de un cuerno en la nariz, enormes cuernos curvos en forma de cuchillas en la parte posterior del volante -el más grande jamás encontrado en un dinosaurio con cuernos- y una punta distintiva y asimétrica en el medio del volante.
Razón por la que se le dio el nombre lokiceratops, que significa «rostro con cuernos de Loki», en honor al dios nórdico Loki, que empuña una espada. El segundo nombre, rangiformis, se refiere a las diferentes longitudes de los cuernos a cada lado del volante, similares a las astas asimétricas del caribú y el reno.
El análisis realizado por el equipo de estudio sugiere que una familia de dinosaurios cornudos, los centrosaurinos, experimentó una rápida evolución y vivió en áreas geográficas relativamente pequeñas a lo largo de la masa continental de la isla de Laramidia.
El estudio de esta nueva especie fue financiado por el Museo de la Evolución, la Universidad de Utah y la Fundación Nacional de Ciencias. El lokiceratops fue descubierto y excavado por primera vez por Mark Eatman durante la primavera de 2019 y ahora se exhibe en el Museo de la Evolución en Maribo, Dinamarca.
Lokiceratops rangiformis apareció al menos 12 millones de años antes que su famoso primo Triceratops y fue el dinosaurio con cuernos más grande de su época, como confirma este estudio. Hace más de 78 millones de años, Lokiceratops habitaba los pantanos y llanuras aluviales a lo largo de la costa oriental de Laramidia. Este continente insular representa lo que hoy es la parte occidental de América del Norte, creada cuando una gran vía marítima dividió el continente hace unos 100 millones de años. Desde entonces, la formación de montañas y los cambios dramáticos en el clima y el nivel del mar han alterado el mundo invernadero de Laramidia donde prosperaron Lokiceratops y otros dinosaurios.
Restos encontrados en las mismas capas incluyen a los dinosaurios ceratópsidos Judiceratops, Albertaceratops, Mesusaceratops, Wendiceratops, y el dinosaurio pico de pato Probrachylophosaurus. Probablemente, eran cazados por un tiranosaurio similar al tiranosaurio Thanatotheristes.
«Aún no sabemos exactamente qué tiranosaurio vivió con estas especies, se necesitan encontrar más fósiles. En ese momento, el invernadero global extendía los ecosistemas tropicales y subtropicales mucho más al norte de lo que están hoy en día», destaca Sertich.
El análisis de los restos sugiere que esta familia de dinosaurios cornudos experimentó una rápida evolución y vivió en áreas geográficas relativamente pequeñas a lo largo de la masa continental de la isla de Laramidia. El alto endemismo observado en los centrosaurinos implica que la diversidad de los dinosaurios está actualmente subestimada y no es directamente comparable a los grandes rangos geográficos (históricos) que se observan en la mayoría de los grandes mamíferos en la actualidad.
«No esperaríamos ir al Serengeti y encontrar cinco especies de elefantes viviendo juntas, y estos animales son del mismo tamaño. La única forma de sostener este nivel de hiperdiversidad es porque están separados por preferencias de apareamiento y comportamientos de cortejo similares a algunos pájaros y peces de hoy en día», explica Mark Loewen, paleontólogo del museo y coautor principal de la investigación en declaraciones recogidas por la agencia SINC.