La policía se saltó los protocolos de extranjería en la detención de Nacho Cano

La policía se saltó los protocolos de extranjería en el caso Malinche, la investigación en torno a las presuntas irregularidades en la contratación de empleados para la obra original de Nacho Cano y que condujo a la detención del artista y empresario. Según revela El Mundo, los agentes llevaron a cabo actuaciones que exceden las competencias de una comisaría de distrito al tratarse de un caso en el que podría haber un delito de trata de seres humanos.

Fuentes policiales citadas por este diario sostienen que el comisario, Alberto Carba, debería haber elevado los datos de la denuncia a la Brigada de Extranjería de Madrid o bien a la UCRIF (Unidad contra las Redes de Inmigración y Falsedades), que serían las unidades especializadas en casos como el que presuntamente se atribuye al músico y compositor.

Sin embargo, como revela El Mundo, estas unidades especializadas solo fueron informadas a posteriori. Este asunto, según informan, ha generado gran malestar interno en la policía por las irregularidades en el procedimiento, así como por la amplia repercusión mediática de un caso que, consideran, debería haberse llevado de forma más discreta en sus momentos iniciales.

Después de su detención, Nacho Cano se defendió poniendo en entredicho la actuación policial y acusando directamente al comisario Alberto Carba, responsable también de la operación contra el bailaor Rafael Amargo por presunto tráfico de drogas. La Audiencia Provincial de Madrid lo absolvió finalmente de esta acusación tras anular las escuchas telefónicas y el registro que los agentes policiales practicaron en su domicilio.

Carba también estuvo vinculado con el empresario Javier López Madrid y el comisario Villarejo por el presunto encargo que el primero realizó al policía para que acosara a la doctora María Elisa Pinto debido a un conflicto personal.

El Sindicato Profesional de Policía (SPP), mayoritario en las escalas de mando de la Policía Nacional, ha denunciado el «injustificado ataque» contra el jefe de la Comisaría de Centro de Madrid, en relación con este caso. En un comunicado, el SPP ha manifestado «su absoluto rechazo a las acusaciones infundadas y falsas realizadas desde distintos medios de comunicación» contra dicho mando, a la vez que ha reclamado «el apoyo expreso» de la Dirección General de la Policía, «conocedora de primera mano de la situación de presión constante que sufre el comisario y de la específica situación en la que la investigación se encuentra».

Por su parte, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, defendió la actuación de las fuerzas de seguridad y aseguró que «la Policía Nacional no persigue personas, investiga hechos».

La titular del Juzgado de Instrucción número 19 de Madrid, la misma magistrada que investiga a la pareja de la presidenta Isabel Díaz Ayuso por presuntos delitos fiscales, ha recibido el atestado policial con las denuncias al productor musical Nacho Cano por la supuesta contratación ilegal de inmigrantes para su espectáculo musical Malinche.

Fuentes jurídicas han indicado a Efe que la jueza recibió este miércoles el atestado policial, con el que iniciará una investigación, presumiblemente, por delitos contra los derechos de los trabajadores y de favorecimiento de la inmigración ilegal.

El productor musical Nacho Cano fue detenido el pasado martes por contratar presuntamente a inmigrantes en situación irregular para su musical Malinche, que lleva más de 500 funciones desde su estreno en el 2022 en el recinto Ifema. Los agentes de la Policía Nacional llevaron a cabo el arresto después de recibir denuncias de extranjeros afectados. En concreto, se acusa a Cano de un presunto delito contra los derechos de la población inmigrante y otro contra los derechos de los trabajadores. Tras tomarle declaración, ha quedado en libertad con cargos a la espera de una citación judicial. En el marco de la operación, ha sido detenida una mujer supuestamente relacionada con los hechos delictivos y con el productor teatral.

«El criminal no soy yo, es la policía, es a los que hay que investigar», defendió el músico y promotor teatral tras su detención «de 10 minutos», que él cree que se ha ejecutado para hacer «la foto» y filtrarlo a los medios de comunicación, según recoge la agencia Efe. «Si me encuentran muerto en la cuneta ya sabéis quién ha sido», añadió el artista en una comparecencia ante la prensa posterior a su detención, tras acusar a las fuerzas policiales de seguir «una maniobra orquestada» y de haber querido «achantar» y coaccionar a parte de la plantilla del musical. 

En opinión de Cano, es el propio Gobierno de España el que utiliza su detención como cortina de humo para desviar la atención sobre la imputación de la mujer de Pedro Sánchez, Begoña Gómez. Según él, lo han utilizado como cabeza de turco por «la única razón» de ser «amigo de Ayuso» y por ser «el único artista que se atreve a decir "no soy comunista ni de izquierdas"», ha expresado con contundencia, recalcando: «Van a por mí como han ido a por el novio de Ayuso, a por su hermano, a por su padre, y solo les quedaba yo».

Sobre los presuntos hechos, el productor musical ha asegurado que la denunciante es una persona conflictiva y que su única intención era dar a los actores la oportunidad de triunfar. «Estamos en un país lleno de inmigrantes en situación irregular que viven del Estado», ha opinado, «y este no es el caso».