El huracán Kirk ya bate récords en el Atlántico antes de afectar a Galicia

El pronóstico sobre la actividad ciclónica finalmente sí se ha cumplido. A comienzos del 2024 las principales organizaciones científicas que vigilan el Atlántico anunciaron unos meses muy movidos. Quizás no se han formado tantos como se esperaba, ya que hubo un par de meses sin actividad, pero la destrucción que ha generado por sí solo Helene en la costa este de Estados Unidos ya ha provocado que esta temporada sea histórica.

Además, en los últimos diez días, el Atlántico se ha desatado por completo, formando un ciclón tras otro. Isaac y Joyce se movieron más al norte de lo habitual y afectaron a Galicia ayudando a canalizar aire húmedo tropical desde el Caribe a la comunidad gallega y propiciando las intensas lluvias del pasado martes que acumularon hasta 95 litros por metro cuadrado.

El siguiente ciclón en la lista de nombres del Centro Nacional de Huracanes (NHC), con sede en Miami, es Kirk. «Es la primera vez desde 1851 que en el Atlántico se han formado tres huracanes entre el 25 de septiembre y el 1 de octubre», apunta el experto en ciclones Philip Klotzbach de la Universidad de Colorado. En sus pocas horas de vida, Kirk ya ha conseguido batir varios récords. «Ha alcanzado la fuerza de huracán más al este del Atlántico a estas alturas del año en la era de los satélites», añade Klotzbach.

Kirk sigue intensificándose y la previsión del NHC anuncia que hoy alcanzará categoría 4. «También es el punto más al este del Atlántico tropical en el que una tormenta ha alcanzado la fuerza de huracán mayor a estas alturas del año desde que se tiene registro. El récord anterior era de 1893», recuerda el investigador.

En condiciones normales, los ciclones nacen en el suroeste del desierto del Sáhara y salen al océano. Las aguas cálidas le proporcionan el sustento necesario para que empiecen a crecer. Mientras se alimentan, emprenden un viaje hacia el Caribe a través de los vientos que dominan las latitudes tropicales, de este a oeste. Por el camino son sistemas de bajas presiones cada vez más profundos que se convierten en huracanes que van ganando categoría. Cuando alcanza o supera la categoría 3 se consideran huracanes mayores.

Sin embargo, al igual que Isaac y Joyce, Kirk abandonará el camino habitual y empezará una migración hacia el norte. El pronóstico señala que este fin de semana estará por encima de los 30 grados latitud norte manteniéndose con categoría 3. El lunes está previsto que su fuerza disminuya, pero seguirá siendo un huracán a unos 40 grados norte. El martes continuará ascendiendo y el NHC sugiere que todavía mantendrá su condición de huracán a unos 44 grados, al oeste de Galicia, aguantando el tipo mucho más al norte de lo normal. Sería entonces cuando procedería a convertirse en una borrasca de latitudes medias.

La evolución de Kirk puede experimentar cambios, pero parece probable que el próximo miércoles sus restos afectarán a la comunidad a través de lluvias intensas y vientos fuertes.

Mientras, este fin de semana se espera la llegada de un nuevo río de humedad tropical que provocará que el frente que cruzará el noroeste peninsular durante la madrugada del domingo sea bastante activo. La Agencia Estatal de Meteorología ha activado un aviso amarillo en el suroeste de la provincia de A Coruña por acumulaciones de 40 litros por metro cuadrado en el plazo de 12 horas.