Europa lanzará su primera misión para defender al planeta de impacto de asteroides
Sociedad
Hera explorará un sistema binario para comprobar si es posible desviar su trayectoria si se acercan a la Tierra
05 Oct 2024. Actualizado a las 09:08 h.
¿Y si alguno de los más de 35.000 asteroides conocidos cuyas órbitas están relativamente cerca de la Tierra modifican su trayectoria para dirigirse directamente a nuestro planeta? No es una amenaza ficticia, sino que en algún momento podría convertirse en un peligro real. Es algo que preocupa, y mucho, a las agencias espaciales, que desde hace años intentan buscar una solución. Ahora mismo, la alternativa más factible para hacer frente a una gigantesca roca que se dirija a la Tierra en trayectoria de colisión es desviar su trayectoria. Es lo que hizo la NASA en el 2022 cuando hizo impactar su nave Dart sobre el asteroide Dimorphos, que orbita en torno a otro mayor y mucho más amenazante, el Didymos.
El problema es que, pese a los estudios que se hicieron, realmente se desconoce si esta misión ha tenido éxito o no. Si ha logrado realmente desviar lo suficiente la trayectoria del enorme objeto espacial. La respuesta a esta incógnita la espera ofrecer ahora la misión Hera de la Agencia Espacial Europea (ESA), el primer proyecto del viejo continente dedicado en exclusiva a la protección de nuestro planeta frente a posibles impactos del exterior.
Todo está listo para el lanzamiento de la misión el próximo lunes desde la Estación Espacial de Cabo Cañaveral en Florida (Estados Unidos) a bordo de un cohete Falcon 9 de la empresa Space X, de Elon Musk. Pero por si algo falla ese día la ventana de oportunidades estará abierta hasta el día 27 de este mes.
La ESA confía en un inminente lanzamiento, incluso este lunes, pese a que el cohete Falcon 9 sufrió una anomalía tras su regreso a Tierra hace unos días después de lanzar a la nave Crew-9 que traerá de vuelta en febrero del 2025 a dos astronautas atrapados en la Estación Espacial Internacional. «La base sobre la que trabajamos en estos momentos es el día 7. Estamos listos para lanzar el lunes», explicó hace unos días Ignacio Tranco, director de vuelo de la ESA.
Si todo sale bien, Hera será la primera nave espacial en encontrarse con un sistema binario de asteroides y su estudio científico mejorará en gran medida nuestra comprensión de cómo se forman los sistemas binarios y por qué son tan comunes. Llevará dos pequeños satélites, dos cubesat del tamaño de una caja de zapatos que se incrustarán en las órbitas de Dimorphos y Didymos para realizar un seguimiento detallado en el que recabarán información sobre la masa, la composición y el cráter que la misión Dart de la NASA dejó en Dimorphos. De esta forma, los científicos podrán evaluar de la forma más completa posible la efectividad de la técnica de desviación empleada. Y este es, precisamente, el gran objetivo: evaluar la eficacia de la desviación de asteroides para convertir lo que ahora aún es un experimento en una técnica de defensa planetaria bien comprendida y repetible.
Una vez lanzada, Hera iniciará una fase de crucero de dos años. Una maniobra inicial en el espacio profundo en noviembre del 2024 será seguida por un sobrevuelo de Marte que ofrecerá una vista única y emocionante de la luna marciana Deimos en marzo del 2025. Una segunda maniobra en el espacio profundo en febrero del 2026 alineará a Hera para su llegada al sistema binario de asteroides. Un «encuentro impulsivo» en octubre de 2026, según la ESA, llevará a Hera a las proximidades del sistema de asteroides para su inserción en órbita.
Participación española
La nave espacial Hera, con una docena de instrumentos con los que también se probarán nuevas tecnologías para la navegación espacial autónoma, ha contado con un presupuesto de 363 millones de euros. La ha construido el grupo espacial y tecnológico OHB, en Alemania, con aportaciones de 18 países europeos y Japón.
Desde España, la empresa GMV ha liderado un consorcio internacional para desarrollar el sistema de guiado, navegación y control (GNC), que incluye la parte de análisis de las operaciones de proximidad de Hera y del cubesat Juventas. En la electrónica del gravímetro GRASS de este último ha participado la compañía Emxys, según recoge la agencia de noticias científicas Sinc.
Por su parte, Sener ha producido antenas de baja ganancia y Thales Alenia Space Spain ha diseñado subsistemas de comunicación de la misión. Todos los participantes cruzan los dedos para que pueda despegar sin problemas este mes de octubre.
Si por cualquier incidencia la misión no pudiera despegar en la ventana de lanzamiento previsto habría que esperar dos años para tener una nueva oportunidad. Pero este es un escenario que la Agencia Espacial Europea no contempla.