Rubén Pena, dueño de la primera vaca muerta en Galicia por EHE: «A enfermidade leva un ano en España. É hora de que se poñan as pilas para buscar unha vacina»

El 8 de septiembre Rubén Pena Rodríguez empezó a observar como una de sus vacas tenía comportamientos extraños. No era habitual que el animal, uno de los más rebeldes del rebaño, se dejara atar. Pero unos días después observó cómo su piel era como el cartón, tenía mocos, cojeaba e incluso había perdido el apetito. Este ganadero de O Campo de Mende, en el concello de A Capela, llamó al veterinario, que tomó muestras del animal. Unos días más tarde se confirmó el primer caso de enfermedad hemorrágica epizóotica (EHE) detectado en Galicia. La vaca, que acabó muriendo, fue la primera de las 172 reses que han fallecido hasta ahora en la comunidad debido a la enfermedad, según el último recuento de la Consellería do Medio Rural.

Más de dos meses después de que empezara a ponerse enferma, la normalidad ha vuelto a la granja de este hombre, pero su discurso destapa la decepción que siente en relación a cómo se ha gestionado la enfermedad: «A EHE leva un ano en España e é hora de que se poñan as pilas para buscar unha vacina. Porque entendo que desenrrolar unha vacina leva tempo, pero tamén hai que querer e parece que non queren que haxa actividade agrogandeira». A principios de mes Agricultura reconoció en una respuesta a una pregunta formulada por el grupo parlamentario de Sumar que a corto plazo no había visos de que estuviera disponible una vacuna comercial. Al parecer, según publicó Animals Health, en Japón y también Estados Unidos hay dos tipos de vacuna e incluso están abiertas varias líneas de investigación, pero en Europa no hay registrada ninguna.

La EHE, bien conocida en Estados Unidos, Canadá, Australia o África, no llegó a Europa hasta el 10 de noviembre del 2022, cuando las autoridades de Italia detectaron casos en la isla de Cerdeña. Ocho días más tarde llegó al sur de España. Hace más de un año, como recuerda Rubén Pena. Aunque se sabe que al mosquito no le gusta el frío, o eso se cree, no hay que bajar la guardia: «Aínda están vindo días con calor. Pero o peor está por chegar, na primavera, cando volva a calor», dice este ganadero bregado en el campo de A Capela.

De momento, en su explotación no ha habido más casos de EHE, aunque eso no le resta preocupación sobre el asunto. Porque como apunta en el caso de que esto no se frene y continúen muriendo vacas «os pequenos pecharemos. Logo o peor vai ser para os fillos que veñen detrás. Pero tamén hai que pensar unha cousa, que un país é coma unha casa. Cando na casa non hai horta ou animais, hai que mercar todo fóra e haberá quen non teña cartos para facelo. Pois a un país pode pasarlle o mesmo e haberá quen non teña para comer», advierte al tiempo que invita a revisar la historia y recordar qué pasó con la Revuelta Irmandiña «porque pode acabar pasando o mesmo».

Este ganadero no habla de otra cosa más que de conservar y garantizar la soberanía alimentaria y, para ello, hay que estar preparados ante enfermedades como la EHE, transmitida por un mosquito culicoide que debido al aumento de las temperaturas parece haberse adaptado a estas latitudes. De ahí la urgencia de vacuna. Eso es algo que también ha pedido el titular de Medio Rural, José González, al Ministerio de Agricultura. Durante la última reunión del Consello Agrario se acordó pedir al departamento que dirige Luis Planas que coordine los trabajos de investigación para la vacuna. Además, se aprobó crear un modelo de alerta temprana para avisar de una patología que afecta a unas 29 comarcas ganaderas gallegas. Medio Rural también anunció ayudas para los ganaderos que han sufrido pérdidas de animales. Estás tendrán carácter retroactivo.