Carne de ternera de Os Ancares a la carta: el nuevo regalo personalizado de Navidad

¿Se puede customizar un lote de carne de ternera que se va a mandar como regalo de Navidad? Por supuesto que sí. Si un lote considerado convencional lleva una variedad de productos (por ejemplo, jarrete, solomillo y filetes), el comprador puede elegir un solo producto y mandarlo a la persona o a las personas con las que quiere tener un detalle en estas fiestas. En bastantes casos, con el envío se manda una tarjeta regalo.

Con ese criterio se trabaja (y a buen ritmo, desde luego) en la carnicería que la cooperativa ancaresa A Carqueixa, con sede en el municipio de Cervantes, tiene en la plaza de abastos de Lugo ciudad. Una visita al negocio este miércoles permitía ver  que los lotes ya preparados, a la espera del viaje que los llevaría a diferentes puntos de España, ocupaban una buena parte del local. El responsable de la tienda, Luis Estrada, reconocía, eso sí, que ciudades como Barcelona, un lugar muy habitual de la emigración de la comarca de Os Ancares, y Madrid sobresalían entre los destinos.

Ni la preparación de los lotes en estas fechas ni la buena aceptación en el mercado son detalles nuevos. La cooperativa ya los ofrecía el año pasado, aunque desde entonces se aprecia una notable novedad: «Cada vez se mandan máis», comentaba este jueves Luis Estrada. Lo habitual es que en cada uno se incluyan productos variados (por ejemplo, jarrete, filetes y chuletas), si bien aumentan los clientes que demandan paquetes personalizados, adaptados a sus gustos. Los tamaños de los envíos varían, pero no es raro recibir encargos de gente que quiere mandar un lote de diez kilos.

Tampoco resulta extraño, por lo que explicaba el encargado, que se pidan paquetes que lleven solo una carne determinada. El origen del producto, procedente de una ganadería tradicional y con alimentación natural para las reses, garantiza la calidad en general y el sabor en particular, como recalcaba Luis Estrada este jueves. Al mismo tiempo, entre esa calidad y la salida en el mercado parece darse una relación directamente proporcional: «Mesmo soben as vendas, sobre todo na páxina web», afirmaba el responsable.

Los precios varían según el tipo de carne que se quiera elegir. Consultando la página web, se observa que un kilo de costilla cuesta 12,90 euros, que uno de chuletones anda por 19,95 euros o que uno de filetes vale 15,95 euros. Pero los encargos no se mueven solo por las nuevas tecnologías, ya que han sido numerosos los clientes que estos días han hecho sus reservas acudiendo al mercado de la plaza de abastos de Santo Domingo, en niveles similares a los del año pasado.