La Voz de Galicia

Gran despliegue de medios para localizar la fortuna de oligarcas rusos en España

Somos Mar

Melchor Sáiz-Pardo Madrid / Colpisa

Las autoridades inmovilizan dos superyates en Barcelona y Mallorca

15 Mar 2022. Actualizado a las 20:29 h.

«Localizar esas fortunas va a ser una labor de meses, cuando no de años», avisan en el Ministerio de Hacienda. Desde hace dos semanas centenares de policías y guardias civiles de Información, especialistas en «grupos rusos»; miembros del CNI, notarios, empleados de banca y de aseguradoras, administradores, fiscales, funcionarios de los ministerios de Industria, de Transportes, de Economía, de Hacienda, de Justicia; o del Banco de España, entre otros, trabajan a tiempo completo para tratar de seguir el complejo rastro en España de los bienes e intereses de los oligarcas cercanos a Vladimir Putin para bloquearlos.

El último listado que manejan los investigadores incluye a 862 personas y 53 identidades diferentes de Rusia y Bielorrusia, sobre los que pesa, por orden de la Comisión Europea, la imposición de medidas de «restricciones de viaje y la inmovilización de activos». Ninguno de ellos se encuentra en la actualidad en territorio español, ni como residente, ni se corresponden con los 79.485 rusos empadronados en España.

Lo que no significa que estos multimillonarios hayan pasado por España en distintas ocasiones o tengan intereses en territorio nacional en forma de barcos, inmuebles o sociedades.

A los funcionarios les consta que un total de once conocidos oligarcas rusos tienen o han tenido «inversiones, relaciones o intereses conocidos y públicos» en España. Se trata de Mikhail Fridman, Sergey Chemezov, Petr Olegovich Aven, Arkadi Rotenberg, Boris Rotenberg, Alisher Usmanov, Vagit Alekperov, Andrey Molchanov, Viktor Vekselberg, Roman Abramovich y Alexander Mijeev. La mayoría de ellos tiene o han tenido grandes buques de recreo en puertos nacionales, además de amarres, sobre todo, en Barcelona.

Los seis primeros ya están en la lista negra de la UE. Ahora España ha actuado contra dos de ellos con la inmovilización en Barcelona y en Mallorca de los superyates Valerie, de Chemezov, y Lady Anastasia, de Mijeev.

La Administración española ha comenzado por los barcos después de que la Sociedad Estatal de Salvamento Marítimo requiriera información a los puertos deportivos sobre embarcaciones con «bandera rusa o de armadores rusos» superiores a 24 metros de eslora. Pero la investigación es compleja porque la mayoría tienen bandera de conveniencia y están a nombre de sociedades caribeñas. El Ministerio de Transportes trabaja con las compañías aseguradoras para conocer a los titulares de bienes muebles e inmuebles y de sociedades mercantiles.


Comentar