España recibe un aluvión de toneladas de merluza ibérica en la recta final del año

A dos meses y medio de finalizar la vigencia de los totales admisibles de captura (TAC) y cuotas para el 2022, Bruselas aumenta las posibilidades de pesca de merluza en las aguas ibéricas —del golfo de Vizcaya al de Cádiz, pasando por aguas gallegas—, ni más ni menos que un 84 %. Esa cuota adicional de 4.122 toneladas para el presente ejercicio eleva hasta 9.201 el cupo para la flota de bajura y litoral y fue anunciada ayer por el ministro de Pesca, Luis Planas, antes del Consejo de Ministros del ramo en Luxemburgo. Se trata de un acuerdo «muy significativo y tremendamente importante para España», porque «responde a una petición de nuestro país en base a los informes científicos que avalan la suficiente disponibilidad de existencias de esta especie», dijo Planas.

El incremento de la cuota beneficia a 1.200 embarcaciones pesqueras españolas localizadas principalmente en el Atlántico, Cantábrico y el Golfo de Cádiz, y en su mayoría de arrastre, volanta, palangre de fondo y artes menores.

La revisión del cupo se abordó, según el Ministerio de Agricultura y Pesca, por la insistencia de España en revisar la regla de explotación fijada para esta especie. Ocurre que hace dos años, el Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES, por sus siglas en inglés) incluyó la merluza en la categoría 3, donde se encuadran aquellos stocks de los que no hay datos suficientes y se opta por la prudencia a la hora de fijar posibilidades de pesca. Pero ahora se ha realizado una nueva evaluación de la población, corrigiendo el fallo que había en el modelo de evaluación, y eso ha permitido reclasificarla en la categoría 1, con el correspondiente incremento del TAC ajustándolo al que se corresponde con el de una especie explotada dentro del rendimiento máximo sostenible. De esta manera se ha podido revertir la tendencia de los últimos 8 años, en los que se anotaron recortes sucesivos en la cuota de merluza sur.

«Objetamos esa consideración porque entendíamos que el stock se encontraba en buen estado biológico, por referencia a la series históricas disponibles de capturas y que se podía continuar faenando, y ahora los informes científicos del ICES nos han dado la razón», explicó el ministro. Desde aquel momento el ministerio ha trabajado junto con el Instituto Español de Oceanografía (IEO) para plantear un modelo alternativo a ICES que permitiese recuperar la categoría 1 del recurso pesquero, y salir del enfoque precautorio que propiciaba un TAC muy limitado. Este modelo fue presentado y aprobado en junio, y ha propiciado que el ICES revisase su recomendación para la merluza sur.

Es, sin duda, «unha boa noticia», apunta Basilio Otero, presidente de las cofradías españolas, pero habrá que darse prisa para poder consumir tal aluvión de toneladas de merluza. De la misma opinión es Juan Carlos Corrás, gerente de Pescagalicia, que señaló que «aunque llega un poco tarde» es una buena noticia.