Científicos buscan con cámaras las madrigueras de cigala para saber cuánta hay en Galicia
Somos Mar
Los biólogos señalan que esta metodología es de menor impacto que la que se realizaba con buques pesqueros comerciales
20 Sep 2024. Actualizado a las 04:45 h.
Atrás quedan las campañas Caracas que el Instituto Español de Oceanografía (IEO) desarrollaba con la flota pesquera para conocer el estado de las poblaciones de cigala en la unidad funcional 25 (UF 25), que cae frente a las costas gallegas y en la que está cerrada la extracción del crustáceo desde el 2017. Ahora la evaluación de la cigala (Nephrops norvegicus) la hace solo el personal científico del IEO y no tiene parte comercial. Emplean cámaras para grabar las madrigueras activas y así poder conocer su estado.
Comenzaron hace tres días, en el marco de la campaña denominada ISUNEP25_0924 a bordo del Ramón Margalef. Estaba pensada para antes en el calendario, pero según trasladaron al sector se retrasó por una avería en el buque oceanográfico.
Como informa el IEO en un comunicado, el objetivo principal de esta prospección es la de estimar la abundancia de cigala en el noroeste de Galicia con tecnologías de imagen submarinas y muestreos biológicos. Los científicos registrarán imágenes del fondo marino para determinar la abundancia de la Nephrops norvegicus del stock de Galicia norte, que abarca unos 5.800 kilómetros cuadrados entre Fisterra y Cedeira.
Esta metodología basada en cámaras es utilizada por equipos científicos de Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES, por sus siglas en inglés) en varias poblaciones europeas para identificar y cuantificar las madrigueras activas de cigala con un impacto bajo en los fondos marinos sedimentarios donde habita esta especie. Para ello, se realizan grabaciones de tramos prefijados para cubrir toda el área del stock y se realizan muestreos mediante un patín epibentónico, equivalente a un bou de vara, para obtener información biológica y genética sobre la cigala y analizar las comunidades del fondo marino.
Un equipo de expertos en fondos marinos analizará el sedimento del área mediante muestreos con dragas. Por último, el equipo de geología durante la campaña realizará un cartografiado de alta resolución del fondo marino para caracterizar los fondos donde se encuentra la especie.
Esta campaña multidisciplinar, detalla el IEO, permitirá obtener resultados adecuados para estimar la abundancia de cigala de una manera directa, «ya que las estimaciones provenientes de los datos pesqueros pueden estar condicionadas por los ciclos de permanencia de la cigala dentro de la madriguera o por la especie objetivo de cada marea de pesca», explica Isabel Herráiz, investigadora del Centro Oceanográfico de A Coruña y responsable del proyecto.
Esta campaña, en la que participa personal de los centros oceanográficos de A Coruña, Vigo, Cádiz y Madrid del IEO, se realiza por tercer año y tiene una periodicidad anual.
La metodología empleada es la óptima para estimar la abundancia de cigala según los estándares europeos marcados por el Consejo Internacional para la Exploración del Mar (ICES, por sus siglas en inglés), el organismo intergubernamental que proporciona el consejo científico sobre los stocks del Atlántico nororiental a la Comisión Europea.