Oceana asegura que el 81 % de los españoles está interesado o muy interesado en tener más datos del pescado que consumen procesado
Somos Mar
Forma parte de su campaña para que la Comisión Europea exija más información sobre la procedencia y método de obtención de un producto en conserva, en platos preparados e, incluso, servido en restaurantes u hoteles
23 Oct 2024. Actualizado a las 04:55 h.
El 81 % de los consumidores españoles está muy interesado o interesado en recibir más información sobre el pescado que come, incluidos productos marinos procesados como el atún en lata, los palitos de pescado o el surimi, según una encuesta realizada por la organización Oceana y publicada este martes. Para el estudio, la organización conservacionista entrevistó a 1.023 personas en España, de las que un 46 % dijo estar muy interesado en recibir más información, un 35 % aseguró estar interesado y un 15 % afirmó estar bastante interesado. Además, un 3 % reconoció estar un poco interesado y el resto dijo no estar interesado.
Oceana indicó en un comunicado que, mientras que los requisitos de información son estrictos para los productos del mar frescos o congelados, los consumidores de la Unión Europea «se quedan a oscuras cuando se trata de productos procesados o cuando piden pescado o marisco en restaurantes».
De acuerdo con la encuesta, para el 41 % de los españoles es extremadamente importante tener información sobre dónde los productos marinos procesados se capturaron o produjeron, en tanto que un 36 % lo considera importante y un 16 % lo ve bastante importante. Asimismo, el 48 % opina que es extremadamente importante tener información sobre las especies de pescado utilizadas en los productos procesados, un 36 % lo ve importante y un 12 %, bastante importante.
El estudio también asegura que, para un 36 % de españoles es extremadamente importante saber cómo fueron capturados los productos marinos procesados, es decir los artes de pesca empleados. Para un 39 % es importante y para un 17 % bastante importante, mientras que para un 6 % es un poco importante. «Tener esa información básica permitiría a la gente tomar decisiones sostenibles e informadas al comprar productos del mar, también en restaurantes y servicios de restauración a gran escala, establecimientos que en la actualidad están exentos de proporcionar información básica como la especie, el origen y el método de captura», señaló Oceana.
La directora de la campaña de Oceana sobre pesca ilegal y transparencia en Europa, Vanya Vulperhorst, declaró que la información sobre los productos del mar consumidos permite a los ciudadanos evitar poblaciones que son objeto de sobrepesca o productos asociados con actividades ilegales, prácticas medioambientales no sostenibles o condiciones laborales no éticas. «Pedimos a la Comisión Europea que escuche a los ciudadanos y exija más información sobre los productos del mar procesados en el mercado de la Unión Europea», añadió.
El estudio agrega que para un 34 % de los españoles es extremadamente importante saber si el pescado que consumen está sobreexplotado o no, para un 37 % resulta importante y para un 20 %, bastante importante.
Además, para el 37 % de españoles es extremadamente importante conocer el impacto del método de pesca en el medio ambiente y en especies como delfines y tortugas. Un 35 % lo ve importante y un 20 %, bastante importante.
A la luz de los resultados, Oceana instó al candidato designado a ser el próximo comisario europeo de Pesca, Costas Kadis, y a la Comisión Europea a priorizar la revisión del reglamento sobre la Organización Común de Mercados, la ley que establece los requisitos de información al consumidor sobre pescado.
En concreto, la organización pide expandir su alcance para que incluya los productos del mar procesados, de modo que se dé información sobre la especie, el origen o los artes de pesca.
También exige que para todos los productos del mar se muestre información científica sobre sostenibilidad, como el estado de la población de la especie, y que se expanda el alcance de la norma para incluir el sector de la restauración, de modo que restaurantes u hoteles estén obligados a dar información sobre el método de producción o los artes de pesca.