Jugando a ser armador

La falta de relevo generacional es una de las principales preocupaciones del sector pesquero. De todo. Busca titulados y trabajadores la bajura, la altura, la gran altura... Y los institutos, con cientos de chavales a punto de tener que decidir su futuro laboral, es un buen lugar para buscar esa savia nueva que necesita la actividad para seguir viva. Por eso de un tiempo a esta parte los representantes de varias organizaciones de productores han regresado a las aulas, aunque no a los pupitres. La Organización de Productores Anacef, que integra a buques cefalopoderos con base en Galicia, es una de las que han salido de pesca a los centros educativos. Y como quiera que su base operativa está en las islas Canarias es allí donde han desplegado una nueva edición de su campaña Trabaja en Pesca, una iniciativa que llega este año a 200 estudiantes de educación secundaria obligatoria (ESO) de esa comunidad autónoma canarios a la iniciativa, con lo que son ya 1.150 jóvenes a los que se les ha explicado en qué consiste la actividad pesquera, tratando de desmontar la imagen «de dureza extrema que se asocia con el trabajo en el mar y revelando el sector como una profesión estable y con amplias salidas laborales», señalan desde la entidad.

Para convencerlos cuentan con el relato del capitán José Sieira, un veterano del oficio que ha tenido roles clave como inspector y jefe del Servicio de Protección de Recursos, que relata a los muchachos detalles de «una carrera llena de satisfacciones, transmitiendo la pasión que acompaña a quienes eligen el mar como medio de vida».

Y como quiera que el juego es una buena fórmula de aprendizaje, la experiencia de Anacef incluye un juego de mesa especialmente diseñado para que los estudiantes asuman el rol de armadores de barcos pesqueros. Así, través de esta actividad, los jóvenes se enfrentan a decisiones estratégicas, compitiendo por los mejores caladeros y superando los desafíos del océano, acercándose al oficio pesquero de manera práctica y divertida.

La iniciativa se desarrolló en los institutos Motor Grande (Gran Canaria) y Argana (Lanzarote), donde los alumnos, guiados por José Sieira, experimentaron la gestión pesquera desde la toma de decisiones hasta la obtención de ganancias, comprendiendo el valor y la complejidad de esta profesión tan arraigada en las islas. Este año, como novedad, los alumnos tuvieron la oportunidad de visitar el puerto local, explorando de primera mano las diversas salidas laborales en el sector y descubriendo el proceso de comercialización del producto pesquero. La excursión contó, además, con la colaboración del servicio de inspección pesquera y de la cofradía de pescadores de Mogán, cuya participación hizo posible que los estudiantes conocer el día a día en uno de los puntos neurálgicos de la actividad pesquera, desde el desembarque del producto hasta su distribución.