La flota llama a la Comisión Europea a reconsiderar de dónde quiere que venga el pescado

«Ya es hora de que la Comisión reconsidere su enfoque político y de dónde quiere que provengan los productos del mar» que consumen los ciudadanos de la Unión Europea (UE), que dependen de países terceros para siete de cada diez pescados que comen. La Alianza Europea de Pesca de Fondo (EBFA), que preside el gallego Iván López, lo pide tras el varapalo de la Eurocámara a la Comisión por el «demasiado simplista y poco realista» plan de acción que, entre otras medidas, plantea prohibir el arrastre en áreas marinas protegidas.

EBFA interpreta como «otra llamada de atención», un nuevo intento de que no siga «legislando de espaldas a sus proveedores de alimentos, los pescadores», el contundente rechazo de 20 de 24 de los eurodiputados de Pesca a la propuesta del departamento de Virginijus Sinkevicius, comisario de Medio Ambiente, Océanos y Pesca.

La flota comparte con la Eurocámara que en Europa «no podemos seguir tolerando políticas que comprometan la supervivencia de la flota de la UE y la seguridad alimentaria». Son los dos últimos en sumarse «al coro de desaprobación» del plan de acción presentado por la Comisión como un intento de preservar la biodiversidad en los ecosistemas marinos. Antes, lo cuestionaron el Consejo Europeo y el Comité Económico y Social Europeo, recuerda EBFA.

Ante «la opinión mayoritaria» de la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo, la organización pesquera se felicita porque «reconoce las preocupaciones clave expresadas por el sector durante los últimos dos años». Y las enumera en un comunicado, señalando que coincide con la flota al «considerar que un enfoque general que prohíba la pesca móvil con contacto con el fondo no es una solución adecuada y lamenta también que el plan de acción no vaya acompañado de un estudio socioeconómico o de una evaluación de impacto que incluya un análisis científico exhaustivo». La organización pesquera que defiende a una flota tan tradicional como la arrastrera incide en que, «lamentablemente, esto es algo a lo que la Comisión nos tiene acostumbrados habitualmente en el ámbito de la pesca».

EBFA comparte las críticas de los eurodiputados porque el plan de acción sobre los ecosistemas marinos «tampoco propone ningún tipo de medidas de financiación adicionales para las transiciones verde y energética». Y pone el acento en que «destacan una preocupación más amplia por la falta de una consulta genuina con las partes interesadas para apoyar» un paquete de medidas lanzado desde la comisaría que preside Sinkevicius en el que «las consideraciones de proporcionalidad no se incorporan adecuadamente». Concluye recalcando que el acuerdo mayoritario que votará el pleno del Parlamento Europeo en enero censura a la Comisión Europea porque «carece de un enfoque coherente con otras prioridades y estrategias, como garantizar la seguridad alimentaria y la autonomía estratégica de la UE».