71 cerqueros gallegos optan a tres millones por los amarres para recuperar el chicharro

Porque no pudieron pescar jurel de modo dirigido de Fisterra a la frontera con Francia y representó al menos el 18 % de sus capturas anuales entre el 2020 y el 2022, el Ministerio de Pesca, Agricultura y Alimentación reconoció como altamente dependientes de esa especie a 86 cerqueros y barcos que faenan con racú de Galicia, Cantabria, País Vasco y Asturias. Para contribuir a la recuperación de un pescado que también se conoce domo chicharro, les dio la opción de amarrar voluntariamente tres meses del 2023, a elegir entre marzo y septiembre y en períodos consecutivos de 30 días.

Ahora optan a compensaciones por ese paro biológico. Con el 70 % de aportación del Fondo Europeo Marítimo de Pesca y Acuicultura (Fempa) y el 30 % del Estado, para los 71 pesqueros con base en Galicia se han consignado 2.967.662 euros, concretan fuentes del ministerio. Para los ocho de Cantabria, 479.310 euros; y para los tres de Asturias, 138.881. Hay 275.384 euros para los cuatro del País Vasco, cuyo Gobierno autonómico cubre el 30 % que no procede del Fempa. 

Esas ayudas «representan un importante apoyo para las empresas armadoras», subrayan días atrás desde Pesca, ministerio que preside Luis Planas. No cubren sábados y domingos y dependen del arqueo bruto (GT) del barco, con un mínimo de 100 euros diarios y un máximo de 1.608 si superan las 2.500 GT, más 0,80 euros por cada tonelada.