La supuesta hija del rey: «Para mi madre fue una relación sentimental con continuidad»

La supuesta hija del rey Juan Carlos, Ingrid Sartiau, estuvo anoche en el plató de Un tiempo nuevo para hablar sobre la demanda de paternidad que presentó contra el monarca y que fue admitida a trámite por el Tribunal Supremo. A pesar de que la ciudadana belga no desveló muchos detalles nuevos sobre cómo fue la supuesta relación, sí aclaró que no se trataría de un simple encuentro sexual. «Para mi madre fue una relación sentimental con continuidad; por parte de Juan Carlos no lo sé», subrayó la entrevistada, quien también defendió que el monarca sabía de su existencia: «El Rey Juan Carlos sí sabía que mi madre estaba embarazada».

Ingrid Sartiau recordó, además, que su madre nunca estuvo casada y que «siempre tuvo a ese hombre (al monarca) en su vida». «Según mi madre era un hombre muy dulce y afectuoso; para ella ha sido muy duro llevar ese secreto», agregó.

Fue a través de la televisión cómo se enteró de que el monarca español era su supuesto padre: «Estábamos viendo un documental sobre el rey Juan Carlos y me dijo: 'Mira, ese es tu padre'», afirmó la entrevistada, quien insistió en todo momento en que con esta demanda no quiere perjudicar a la Casa Real, algo que también habría querido evitar su madre. «Esperó muchísimo tiempo a decírmelo, para protegerme y no perjudicar a la Casa Real. Pero llega un momento en el que quieres saber de dónde vienes. Tuvimos por ello una discusión en profundidad», añadió.

«Escribí dos cartas a la Casa Real pidiendo que el tema no trascendiera al público, quería que esto se tratara en familia. Nunca tuve el objetivo de llegar a la prensa, yo siempre he querido respetar el secreto de mi madre», aseguró la entrevista.

Al hilo de su presencia mediática, Ingrid Sartiau rechazó las críticas por populismo y defendió la necesidad de conocer la verdad: «Son cosas que no son caprichos, sino algo que a mí me ha resultado muy difícil. Después de 45 años de espera ahora tengo una respuesta. No comprendo por qué la gente lo critica», agrega.

«Mi vida ya se ha trastocado completamente desde el momento en que mi madre contó su historia. Yo esperé seis meses antes de contárselo a mis hijos, porque no quise conmocionarlos. Por desgracia para mí, resulta que mi padre es rey, pero podía haber sido cualquier otra persona», añadió a continuación.

A pesar de que no tiene más pruebas que la palabra de su madre -anoche aclaró que durante estos últimos años no trató de investigar nada por su cuenta ni acudió a los sitios donde, supuestamente, habrían tenido lugar los contactos-, Ingrid Sartiau confía ciegamente en lo dicho. «Estoy absolutamente segura; mi madre hizo una declaración ante un notario y la sigue manteniendo; solo dos personas pueden saberlo: el rey Juan Carlos y mi madre», concluye la entrevistada.