Eurovisión 2016: Estos son los favoritos para ganar la edición de este año
Televisión
Barei, la candidata española, se aleja mucho en las apuestas y algunos incluso ya la sitúan en por debajo de los veinte primeros
14 May 2016. Actualizado a las 22:56 h.
Comienzan a salir las primeras quinielas de Eurovisión. El certamen de este año ya parece tener claros favoritos. Pero también grandes olvidados. Y la cruda realidad es que España empieza a asentarse más en el segundo grupo que en el primero. Barei no se encuentra entre los diez primeros puestos de las casas de apuestas. Ni siquiera entre los quince favoritos del próximo Festival de Eurovisión. Los últimos ensayos han quitado algo de lustre a la representante española, a la que las casas de apuestas sitúan en un discreto decimoséptimo lugar, descendiendo hasta los infiernos del vigésimo primero en el peor de los casos.
Y mientras Barei mira con preocupación los augurios de los expertos, los que empiezan ya a respirar con tranquilidad son los candidatos de Rusia, Francia y Ucrania. Entre ellos, siempre según lo que esperan las casas de apuestas, estará el premio del certamen, llevarse hasta su país la próxima edición de Eurovisión.
Entre este tándem, quien juega con mayor ventaja es Sergey Lazarev, el candidato ruso. Con su canción pop You are the only One, Lazarev intentará conseguir llevarse por segunda vez a su país la gloria eurovisiva. Este joven de 33 años es ya conocido en su país. Llena sus conciertos, vende discos como churros y es reconocido allí a donde va. ¿Conseguirá conquistar también al público europeo?
El segundo y tercer puestos se lo repartirán entre Francia y Ucrania, siendo esta última la que parecía llevarse la mejor parte en las últimas apuestas. Jamala, una tártara de Crimea, ha puesto la nota polémica a esta edición de Eurovisión. En un concurso en el que teóricamente está prohibido llevar canciones con contenido político, Ucrania ha decidido llevarse en la maleta una verdadera bomba que ya ha ofendido a sus vecinos rusos. El tema 1944 trata viejas heridas. Y es que el propio nombre de la canción hace alusión al año en el que miles de tártaros de Crimea -que Rusia decidió anexionar a su territorio hace dos años- fueron deportados por Stalin. ¿Por qué tanto revuelo? Pues porque muchos rusos se han sentido provocados por la canción, ya que entienden que se está señalando directamente lo que ocurre en Crimea a día de hoy.
De confirmarse estos vaticinios, quien se quedaría con la medalla de bronce sería Francia. J'ai cherché, el tema de Amir Haddad, un francés instalado en Israel desde pequeño, mezcla el idioma galo con algunas estrofas en inglés para hablar de todas aquellas cosas que dan sentido a la vida. Si Haddad consigue llevarse a su país la medalla de oro, sería la sexta victoria de Francia en Eurovisión.
Suecia y Australia se quedan en un cuarto y quinto puestos, a la espera de dar la campanada y asaltar alguna de las primeras posiciones de Eurovisión. Australia, que participa este año por segunda vez después del éxito de la edición anterior, llevará una profunda balada que habla sobre la falta del amor. Dami Im, una coreana emigrada a Australia, defenderá el tema Sound of silence.
Los suecos, ganadores de la anterior edición y por tanto anfitriones del concurso este año también se cuelan entre los favoritos a ganar Eurovisión. Por ahora suenan para quedarse con el quinto lugar con su canción If I Were Sorry de Frans.
Por encima de la candidata española, las apuestas sitúan a otros países países como Malta, Armenia, Italia, Reino Unido, Letonia, Israel, República Checa, Serbia, Islandia, Países Bajos, Bulgaria, Chipre, Austria, Polonia, e Irlanda.
En cambio, por debajo de España aparecen Croacia, Hungría, Bélgica, Grecia, Azerbaiyán, Estonia, Alemania, Noruega, Albania, Lituania, Dinamarca, Finlandia, Bosnia y Herzegovina, Suiza, Georgia, San Marino, Eslovenia, Bielorrusia, Moldavia, República de Macedonia y Montenegro.
Rusia, Armenia y Malta se llevan las medallas y los aplausos de las semifinales
Una cita que debía decidir entre 18 propuestas musicales para completar las 42 canciones que participarán el sábado en la gran final de Eurovisión y que apenas tuvo sorpresas. Si las hubo positivas, como el rock duro de Chipre, con un tema pegadizo, o la sorprendente interpretación de la cantante de Austria, que eligió el francés en vez del alemán. Una de las sorpresas -tan agradable como inesperada- fue la de la república Checa, que se clasificó por vez primera para disputar una final de Eurovisión gracias a una puesta en escena correcta y una buena vocalista. Los países que se quedaron a las puertas fueron Grecia, Estonia -que algunos colocaban en la final-, Montenegro, Islandia, Finlandia, Moldavia, San Marino y Bosnia Herzegovina.
La actuación de Sergey Lazarev, representante de Rusia, fue de las más aguardadas, y estuvo caracterizada por un impresionante despliegue visual. Sin embargo, tanto en las redes sociales como entre el público del Globe Arena de Estocolmo You are the only one no fue la más aplaudida. Sí que se llevó grandes críticas Armenia, con Love Wave, una canción pegadiza y una atractiva escenificación, en la que se incluían hologramas. Punto y aparte merece Malta, con su cantante, de gran chorro de voz, que está embarazada de cuatro meses pero que cautivó a los asistentes con su Walk on water. La gala de semifinales de Eurovisión fue ágil y entretenida, y en su tramo final participó como copresentadora Barei, pudiéndose incluso disfrutar de 40 segundos de su actuación.