Algo más sobre la tranquilidad
Torre de Marathón
16 Nov 2014. Actualizado a las 05:00 h.
Cuando toca un domingo sin fútbol, como sucedió ayer, el aficionado no se siente cómodo del todo porque le falta algo importante, más aún si su equipo aparece mal clasificado porque piensa que esa inactividad de la jornada le priva de una ocasión siempre ilusionante en el fútbol, confiando en que el triunfo permitiría mejorar la situación del momento como sucede en el caso del Deportivo. Eso es lo que piensan los seguidores de los equipos mal clasificados, aunque también es verdad que algo parecido sucede a los que aparecen en los primeros puestos de la tabla. Así ocurre con los madridistas, quienes dan -con lógica- por ganado su partido de Éibar, y no conceden esperanzas de que el Barcelona pinche en su campo, donde recibirá al Sevilla. Y al margen, sin perderlos de vista a los dos primeros, vemos a un Valencia que no llegará al título pero rondarlo ya tranquiliza a sus seguidores.
Insistimos en la tranquilidad, siempre difícil de conseguir en el mundo del fútbol. Quienes la disfrutan gozan de un mejor estado de ánimo que ayuda a la hora de tomar decisiones, algo que el deportivismo confía en que no le falte a Víctor Fernández, favorecido por este aplazamiento de la jornada liguera. Parada obligada federativamente hablando y en espera de un partido que se presenta difícil, como son todos los jugados por la Real Sociedad en campo coruñés.