La Voz de Galicia

Deportivo y Arsenal acercan posturas en la negociación por Lucas

Torre de Marathón

Alexandre Centeno

La operación va camino de desbloquearse y Lucas de convertirse en nuevo jugador del Dépor

17 Aug 2017. Actualizado a las 15:21 h.

Lucas está llamado a volver a ser el 7 del Dépor y a pelear o compartir con Andone puesto en el ataque del Deportivo esta temporada que se inicia mañana. Después de varios meses de propuestas y rechazos, ayer Rodrigo Fernández Lovelle, representante del futbolista, volvió a viajar a Inglaterra y mantuvo una conversación con Arsène Wenger, que sirvió para desenquistar un poco la negociación, a la espera de una reunión que tendrá lugar hoy en la capital inglesa.

Sobre la mesa ya no está solo un traspaso del futbolista. La última propuesta del Deportivo fue de doce millones de euros y el Arsenal la rechazó. Tras esta nueva negativa se han situado nuevas alternativas, entre ellas, la de ceder al delantero un año con una opción de compra. Sin embargo, esta posibilidad llevaría incluidas numerosas cláusulas de variables y condicionantes que en estos momentos se estarían discutiendo.

En cualquier caso, parece que le operación va camino de desbloquearse y Lucas de convertirse, de nuevo, en futbolista del Deportivo, ya sea en propiedad o cedido. Si esto se produce, la intención del jugador es viajar esta misma semana a A Coruña y estar en el palco el próximo domingo, aunque para ello tiene que haber acuerdo, toda vez que no tiene intención de rebelarse.

Ayer, por la mañana, Arsène Wenger, ya antes de la conversación con Rodrigo Fernández, dio muestras de buena voluntad, anunciando que abría la puerta de salida al coruñés.

El entrenador francés fue rotundo al ser preguntado sobre el futuro del futbolista gallego: «He abierto la puerta para Pérez. La posibilidad (de que deje el club) está ahí porque tenemos muchos delanteros. Si encuentra una buena oportunidad le ayudaré», añadió. Hace unas semanas, ya había comentado que entendía que el futbolista estuviera descontento, porque había jugado buenos partidos pero no le había dado continuidad.


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