Incertidumbre alrededor de la candidatura de Martínez Loira

Jesús Martínez Loira (Cangas, 1970) ya es, oficial y públicamente, candidato a la presidencia del Deportivo. Este jueves anunció sus líneas maestras, sin concretar nombres relacionados ni con su consejo de administración ni con el proyecto deportivo que tiene en mente. Dejó para más adelante dotar de contenido concreto su proyecto de gestión para el club. Estas son algunas de las preguntas que asaltan tras su comparecencia.

¿Quién es Jesús Martínez?

Él mismo se definió como «un asesor del Deportivo, de los que trabajan, aunque no estoy en nómina del club». Puso en marcha canaldeportivo.com por medio de su empresa, Iris, que acabó comprando el propio club. Nunca trascendió el dinero que se embolsó por aquella operación. Desde entonces, tanto con Lendoiro como con Tino, ocupó puestos remunerados a cargo de proyectos como la construcción de los palcos VIP, entre otros. Asegura que, para formar su consejo tuvo «que conseguir que las personas crean, porque no es profesional, no es remunerado y todos tienen sus trabajos». «No se pueden dedicar full time al tema, no podremos. Aunque pongamos muchas horas. Intentaremos compensar con asesoramiento complementario y que jugadores y exjugadores colaboren», describió.

¿Quién formará el consejo?

No se sabe. Asegura que tiene seis nombres confirmados y dos «en el banquillo», que desea que sean pactados con Abanca y Estrella Galicia. «Son caras totalmente nuevas y súper conocidas en la ciudad», añade. «Voy a reunirme con Tino Fernández y con Lendoiro. Hasta ese momento, no desvelaré nombres», matiza. «No descarto incorporar más gente al consejo en la medida que comiencen los tiempos de paz», avanza.

¿Qué proyecto futbolístico presenta?

No lo ha explicado, emplazando a un «monográfico sobre fútbol» la próxima semana. «Hay que estudiar el modelo de juego. ¿Qué tipo de fútbol gusta en A Coruña? Cambiamos de entrenadores y no sabemos si tenemos un estilo de juego propio. Y nos iremos a un par de sitios de alto nivel a conocer cómo lo han conseguido. Como hacen las grandes escuelas. Un modelo evaluable y medible, implantado por el consejo. Objetivo principal, Galicia. Replantear la residencia, con un número menor de jugadores. Y que los entrenadores también sean de Galicia», adelantó.

Asegura que, con el equipo en competición y con el ascenso como objetivo número 1, «no tiene sentido hablar de nombres, en lo deportivo». Eso sí, tiene claro que, «respecto al segundo equipo, huir de utopías de querer subir a Segunda en base al dinero. No es el modelo. El modelo es tener un fútbol base bien estructurado. Para ello hay que replantear de arriba a abajo el fútbol base, para que en un ciclo no excesivamente largo, pero difícilmente inferior a tres años, se empiecen a ver los resultados. Pretende «mucha vinculación con el fútbol modesto». «Tenemos que dominar el mercado gallego, para buscar menos cosas sueltas en otros mercados. Y con personas de aquí. Es como ha funcionado durante mucho tiempo y como funciona en otros clubes», argumentó.

¿Cuál es su proyecto social?

Afirma que «desde hace cinco años hay una fractura en la masa social del deportivismo. Hemos tenido mala suerte en la transición, no se hizo bien. Hay que limpiar las heridas». Creará un senado, integrado por todos los socios de oro y plata, con capacidad de decisión vinculante en caso de consultas como, por ejemplo, el nombre del club. Habrá delegados especiales para la afición, elegidos por la propia afición.

¿Qué modelo de gestión propone?

«Es uno de los pilares. Fútbol y economía están vinculados. Estoy súper orgulloso de haber participado en esta etapa con el consejo. Y uno de los retos fundamentales se ha cumplido con creces. Rigor financiero, jurídico, económico… es extraordinario. La deuda no es polémica. No deja de ser parte de nuestra historia. Estar orgullosos de haber reencauzado los compromisos. Tenemos esa deuda, pero hemos vivido una etapa extraordinaria que nos ha generado esa deuda. Llegaremos un día con deuda cero, pero los títulos no se van y tendremos seis títulos», resume sin manifestarse sobre cómo se generó el débito.

¿Qué apoyos tiene?

Aunque asegura que quiere disponer de la experiencia de Tino y Lendoiro, afirma: «A día de hoy solo tengo mis apoyos y alguno más. He decidido arrancar conscientemente así. No pediré apoyos para estar en el consejo. Sino para que apoyen el proyecto. Los grandes accionistas van a esperar al final para ver a quién apoyan. Para qué me voy a precipitar, si son cincuenta llamadas telefónicas». «Lendoiro no va a ser mi asesor, pero sería un lujazo que me asesorase, en la parte deportiva por lo menos», concluye.